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Tres cosmonautas rusos llegaron el viernes a la Estación Espacial Internacional con trajes de vuelo con los colores de la bandera ucraniana, en su mayoría amarillos con acentos azules.
Los cosmonautas Oleg Artemyev, Denis Matveyev y Sergey Korsakov despegaron con éxito el viernes desde la instalación de lanzamiento rusa en Kazajstán en su nave espacial Soyuz MS-21, y cuando la nave se acopló a la estación espacial tres horas más tarde y ellos subieron a bordo, se les vio con trajes de vuelo de llamativos colores amarillo y azul.
Rusia dijo que los trajes fueron seleccionados y empaquetados unos meses antes del lanzamiento de la misión. Al hablar de la elección de los colores, el Sr. Artemyev dijo que habían acumulado mucho material amarillo “por lo que necesitábamos utilizarlo”.
“Por eso teníamos que usar el amarillo”.
Desde el comienzo de la invasión rusa de Ucrania, el 24 de febrero, muchas personas de todo el mundo han utilizado la bandera ucraniana y sus colores para mostrar su solidaridad con el país.
Los cosmonautas no dijeron nada que sugiriera que los colores del traje eran una declaración política, pero los observadores dijeron que la coincidencia con la bandera ucraniana sería una coincidencia poco probable.
Eric Berger, editor espacial senior de Ars Technica, dijo que podría ser una coincidencia, pero añadió que “parece una coincidencia muy, muy grande si es así”.
“Todavía no he encontrado a nadie que sepa realmente por qué los cosmonautas rusos llevaban trajes de vuelo amarillos para subir a la ISS. Es una locura si subieron estos trajes a bordo de contrabando”, dijo.
En las últimas semanas, desde que comenzó la guerra en Ucrania, se han producido notables roces entre la agencia espacial rusa Roscosmos y algunos de sus socios y clientes.
El presidente de Estados Unidos, Joe Biden, declaró a finales del mes pasado, tras imponer una serie de sanciones económicas a Rusia, que la medida “degradaría su programa espacial”.
A principios de este mes, OneWeb, una empresa de satélites parcialmente propiedad del gobierno británico, canceló el lanzamiento de sus satélites de Internet que debían viajar en cohetes Soyuz de Rusia. Y el jueves, la Agencia Espacial Europea también suspendió una misión a Marte que iba a lanzarse en un cohete ruso.
El jefe de Roscosmos, Dmitry Rogozin, respondió con una serie de mensajes en Twitter, incluso retuiteando un vídeo paródico que sugería que Rusia dejaría atrás al astronauta estadounidense Mark Vande Hei, que tiene previsto regresar a la Tierra desde la ISS en una nave espacial rusa a finales de este mes.
Pero la Nasa ha sostenido que, a pesar de la guerra, las operaciones de colaboración entre ella y Roscosmos continuarán, y que los astronautas de los dos países seguirán realizando de forma segura operaciones de investigación en la órbita terrestre baja a bordo de la ISS.
Roscosmos también confirmó que devolverá al astronauta estadounidense Mark Vande Hei a bordo del vehículo cápsula espacial de Rusia, tal y como estaba previsto, a pesar de las tensiones entre los dos países en la Tierra.
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