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Dos escaladores que quedaron sepultados por una avalancha y fueron golpeados por una ventisca a principios de esta semana en Nueva Zelanda sobrevivieron a las duras condiciones climáticas excavando ellos mismos en la nieve, construyendo una cueva y alimentándose sólo de barritas de muesli.
Los dos hombres, de unos 20 años, habían emprendido una expedición de escalada de tres días en la cordillera de Remarkables cuando provocaron una avalancha de grado 2,5, lo suficientemente grande como para enterrar a una persona.
La avalancha los arrastró 20 metros cuesta abajo, sepultándolos en la nieve. Los hombres, cuyas identidades no se han hecho públicas, pudieron llegar a la superficie excavando ellos mismos. Entonces decidieron llamar a la policía, que alertó al servicio de rescate en acantilados de Wakatipu al darse cuenta del peligro.
Sin embargo, las condiciones de la ventisca impidieron a los equipos de rescate llegar hasta ellos en helicóptero y fracasaron en sus dos intentos.
Los hombres volvieron a su campamento, donde habían pasado la noche anterior, y excavaron una cueva de nieve bajo una enorme roca. Pasaron la noche acurrucados en la cueva, donde hacía relativamente calor.
“Es un terreno muy abrupto y escarpado y es montañoso y nevado… cuando hay tormentas puede ser un lugar bastante inhóspito”, dijo el coordinador del equipo de rescate Russ Tilsley.
Dijo que durante la noche había entre -7C y -12C en las laderas, pero que en la cueva de nieve habría estado entre -1C y 0C.
Los hombres habían pasado tres noches acampando y escalando el pico, pero se despertaron el martes para encontrar sus tiendas enterradas en la nieve. La avalancha se desencadenó cuando empezaron a bajar.
“Tuvieron suerte de estar justo en el borde. Si hubieran estado más lejos en la ladera habrían tenido problemas”, dijo el Sr. Tilsley.
Tras hablar con el dúo, los encontraron de buen humor y decidieron reanudar las operaciones de rescate al día siguiente.
“Se estaba haciendo tarde y decidimos que era demasiado tarde para poner un equipo a pie … sabíamos que teníamos una hermosa mañana tranquila al día siguiente, así que hablamos con los chicos y estaban de buen humor, y decidieron construir una cueva de nieve”, dijo el Sr. Tilsley.
Los hombres tenían unas 15 barritas de muesli para compartir, pero se quedaron sin gas para derretir el agua.
La “gran preocupación” era que podían deshidratarse en la nieve, y comer hielo no era una opción porque el cuerpo habría necesitado más energía para derretir la nieve de la que ganaba.
Un helicóptero del Equipo de Rescate Alpino trató de llegar a ellos el miércoles por la mañana de nuevo, pero fracasó debido a las condiciones meteorológicas adversas.
El equipo pudo finalmente establecer contacto alrededor de las 10.45 horas del miércoles, después de que el tiempo se despejara un poco y les permitiera llegar hasta ellos.
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