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Después de mantener las oficinas y los edificios de apartamentos en funcionamiento durante la pandemia de Covid-19, los porteros y los trabajadores de los edificios de cientos de grandes propiedades de la ciudad de Nueva York están exigiendo salarios más altos y protecciones de permisos pagados, ya que el contrato sindical de más de 32.000 trabajadores se enfrenta a una fecha de vencimiento que podría poner en duda el mantenimiento de algunos de los rascacielos de lujo de la ciudad.
Si los trabajadores del sindicato se declaran en huelga, eso significaría que el mantenimiento de la basura, las entregas y otras cuestiones de gestión de los edificios de oficinas de Manhattan, los edificios de apartamentos de lujo y las unidades de varios millones de dólares en los rascacielos de gran altura quedarían en manos de los residentes.
El presidente del Sindicato Internacional de Empleados de Servicios Local 32BJ, que representa a 175.000 trabajadores en 12 estados, dijo a The City que las propuestas de la dirección que exigen recortes en las vacaciones y las bajas por enfermedad, así como en los pagos del seguro médico, “equivalen a una bofetada tras el periodo más mortífero para trabajar y vivir en la historia de la ciudad de Nueva York.”
Al parecer, los administradores de los edificios ya están enviando avisos a los inquilinos, y una de las empresas ha comunicado a los residentes de un edificio del Upper East Side que “las actividades del edificio, como las reformas y renovaciones de los apartamentos, las mudanzas y las entregas se verán afectadas negativamente”, según un correo electrónico obtenido por el medio. “Para ello, por favor, programen o reprogramen dichas actividades para que no coincidan con una posible huelga”.
Otra empresa advirtió a los residentes de una propiedad de Brooklyn que contratará a un guardia de seguridad para que atienda la puerta principal, pero el guardia no manejará el intercomunicador, ni filtrará a los huéspedes, ni aceptará paquetes, y los residentes tendrán que sacar la basura a la calle ellos mismos, según los mensajes obtenidos por Bloomberg.
El salario por hora de los trabajadores de los edificios de Nueva York es de unos 26,45 dólares de media, o unos 55.000 dólares al año, según el sindicato. En virtud del convenio de 2018, que expira el 20 de abril, los miembros han recibido aumentos salariales y de prestaciones anuales de alrededor del 3,3%, lo que se ve superado por el aumento del coste de la vida, que se ha incrementado en el área de Nueva York en más del 5% durante el último año, según la Oficina de Estadísticas Laborales de Estados Unidos.
“Estos puestos son esenciales en Nueva York para el mantenimiento de los edificios de toda la ciudad, desde las históricas cooperativas de lujo de Park Avenue hasta los nuevos desarrollos en Brooklyn y Long Island City, pasando por los apartamentos de alquiler estabilizado en el Upper West Side”, según un comunicado del mes pasado del presidente del sindicato, Kyle Bragg.
Mientras las partes negocian un nuevo contrato, “esperamos que la atención sanitaria y los aumentos salariales ocupen un lugar destacado en la mesa de negociación”, dijo.
“Esta pandemia ha sido sólo el reto más reciente que han superado nuestros miembros”, añadió. “Y ha demostrado lo esenciales que son nuestros miembros para el carácter y el éxito de Nueva York. Sabemos que el mercado inmobiliario de la ciudad se ha recuperado y nuestros miembros merecen un paquete de contratos que reconozca los servicios vitales que prestan cada día.”
Más de 170 miembros del sindicato, entre ellos 40 que trabajaban en edificios residenciales, murieron a causa de Covid-19, según el sindicato.
El Sr. Bragg dijo que “no se siente muy confiado” mientras las sesiones de negociación entre el sindicato y las empresas inmobiliarias continúan a lo largo del mes.
El contrato de negociación colectiva entre los miembros del sindicato -que incluye a los superintendentes de edificios, porteros, trabajadores de mantenimiento, encargados de las puertas y otros- incluye los edificios que son propiedad o están gestionados por varias grandes empresas inmobiliarias que negocian como grupo con la Realty Advisory Board on Labor Relations, con propiedades en todos los distritos excepto en el Bronx.
Los trabajadores exigen un salario que esté al menos vinculado a la inflación y sin cambios en sus planes de asistencia sanitaria, que son financiados en su totalidad por los propietarios de edificios y apartamentos.
“Durante los dos últimos años, hemos trabajado en colaboración para proteger a los trabajadores y a los residentes durante la pandemia”, dice el comunicado. “Esperamos poder seguir demostrando que nuestra colaboración es el estándar de oro de las relaciones laborales en Nueva York y en todo el país”.
La última acción laboral organizada -en medio de una ola histórica de actividad sindical, huelgas y otras acciones lideradas por los trabajadores a lo largo de la pandemia- también se produce cuando los costes de la vivienda en la ciudad y en todo Estados Unidos se han disparado.
Aunque los precios de los alquileres en toda la ciudad de Nueva York cayeron en picado al inicio de la crisis de salud pública, desde entonces han aumentado a más del doble de la tasa nacional. Según Apartment List, los alquileres se dispararon un 33% entre enero de 2021 y enero de 2022, el doble de la tasa nacionaly uno de los mayores aumentos de la tasa entre las 100 mayores ciudades de Estados Unidos.
El alquiler medio en un apartamento de dos habitaciones en la ciudad superó los 2.150 dólares en febrero, según la web. En Manhattan, esa cifra fue de 3.700 dólares, un aumento de casi el 24% respecto al mismo mes de 2021.
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