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El gobierno de Biden está dejando que los agentes fronterizos estadounidenses eximan a los refugiados ucranianos de la política de la era Trump que ha impedido que la mayoría de los migrantes sudamericanos y centroamericanos soliciten asilo desde marzo de 2020.
Un memorando del 11 de marzo de la Oficina de Aduanas y Protección Fronteriza (CBP) autoriza a los agentes, “caso por caso”, a eximir de la expulsión a los ciudadanos ucranianos que lleguen a los cruces fronterizos terrestres de Estados Unidos, en virtud de una disposición de la ley estadounidense -conocida como Título 42- que tanto la administración de Trump como la de Biden han utilizado para expulsar rápidamente de Estados Unidos a los migrantes encontrados por los agentes de la Patrulla Fronteriza por motivos de salud pública, específicamente para evitar la propagación de Covid-19.
“El Departamento de Seguridad Nacional reconoce que la injustificada guerra de agresión rusa en Ucrania ha creado una crisis humanitaria”, escribió Matthew Davies, el director de Aduanas y Protección Fronteriza para los programas de admisibilidad y pasajeros.
“Los no ciudadanos que están en posesión de un pasaporte ucraniano válido u otro documento de identidad ucraniano válido, y en ausencia de factores de riesgo asociados con la seguridad nacional o la seguridad pública, pueden ser considerados para la excepción del Título 42 bajo esta orientación”.
Los Centros de Control de Enfermedades -la agencia responsable de emitir la orden de salud pública que invoca la prohibición de los migrantes de la era Trump- recientemente relajaron sus propios criterios para eximir de la expulsión a los niños no acompañados y no ciudadanos, pero los defensores y activistas de la inmigración han estado presionando a la Casa Blanca para que levante la orden de expulsión por completo.
La invasión no provocada de Ucrania por parte de Rusia ha sumido a Europa en la peor crisis de refugiados que ha visto desde el final de la Segunda Guerra Mundial.
Según las Naciones Unidas, más de 3 millones de ucranianos han huido de su país para evitar la muerte y la destrucción infligidas por las fuerzas rusas desde que comenzó la invasión el mes pasado.
Aunque el presidente estadounidense Joe Biden ha prometido acoger a los refugiados ucranianos “con los brazos abiertos”, hasta ahora Estados Unidos no ha sido un destino importante para los ucranianos, la gran mayoría de los cuales han huido por vía terrestre a países vecinos como Polonia.
Pero según Newsweeklos pocos que han huido a Estados Unidos desde Ucrania se han encontrado con la detención del Servicio de Inmigración y Control de Aduanas, y varios ucranianos que han huido a México con la esperanza de cruzar a Estados Unidos por tierra dijeron que no sabían si serían expulsados sumariamente del país a su llegada.
Preguntada por la escasez de refugiados ucranianos que entran en EE.UU. en una rueda de prensa el jueves, la secretaria de prensa de la Casa Blanca, Jen Psaki, dijo que Biden está “dispuesto” y “feliz” de recibir a los refugiados ucranianos, pero subrayó que la respuesta de la administración a la crisis de los refugiados -incluida la asignación de los 4.000 millones de dólares de ayuda autorizados por el Congreso a principios de esta semana- se ha centrado en proporcionar “asistencia humanitaria” para apoyar a los millones de personas que han huido a los países vecinos.
Añadió que, dado que la “gran, gran mayoría de los refugiados” que huyen de Ucrania desean permanecer en Europa, es allí donde se ha centrado la atención del gobierno estadounidense hasta ahora.
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