El presidente de Francia, Emmanuel Macron, se encuentra en Camerún para iniciar su gira por tres países de África y se espera que hable de la crisis alimentaria en África provocada por la guerra de Rusia en Ucrania, de la necesidad de que Camerún aumente su producción agrícola y del recrudecimiento de la inseguridad en el país.
En Yaundé, capital de Camerún, para una visita de tres días a este país de África central, Macron visitará después Benín y Guinea Bissau.
El gobierno camerunés dio un lavado de cara a la capital para la visita de Macron. Las excavadoras arrasaron los puestos de los mercados improvisados y las chabolas en todas las calles de Yaoundé por donde pasará el enviado de Macron.
“Han destruido mi único medio de vida”, dijo Solange Kemje, de 28 años, entre los varios cientos de propietarios de puestos afectados.
Otros acogieron con satisfacción la visita del líder francés, esperando que Macron extienda su ayuda ante la creciente inseguridad por la violencia yihadista que se ha desbordado desde la vecina Nigeria.
El estado centroafricano también está luchando contra un conflicto separatista que ha matado al menos a 3.300 personas y ha desplazado a más de 750.000 en cinco años, según la ONU. Los rebeldes están luchando para que la minoría anglófona de Camerún tenga un país independiente llamado Ambazonia.
Algunos esperan que Macron influya en el presidente Paul Biya para que ponga fin al uso de la fuerza como solución a la crisis separatista en las regiones anglófonas de Camerún, dijo Capo Daniel, subjefe de defensa de las Fuerzas de Defensa de Ambazonia, uno de los grupos separatistas.
“Una de las facciones de nuestro movimiento de liberación convocó un encierro para protestar contra la visita de Emmanuel Macron. Pero otros movimientos estarán atentos a este evento con la esperanza de que Emmanuel Macron empuje a Paul Biya a elegir la vía de la resolución pacífica de la guerra (de la violencia separatista) como alternativa a la postura actual del Estado de Camerún de utilizar la guerra para resolver el problema con Ambazonia”, dijo Capo.
Camerún dice que Francia apoya a sus militares para luchar contra los separatistas y la violencia yihadista de los rebeldes nigerianos Boko Haram, pero no ha dado detalles sobre cuántas armas ha recibido de Francia.
Otros esperan que Macron anime a retirarse al presidente camerunés Paul Biya, de 89 años, que lleva cerca de 40 en el poder.
“El debate debería girar en torno a una transición pacífica del poder en Camerún y también a las cuestiones de los derechos humanos y la democracia en Camerún”, dijo Prince Ekosso, líder del Partido Socialista Democrático Unido.
Se acusa a Biya de amañar las elecciones para mantenerse en el poder hasta su muerte. Biya sostiene que siempre ha ganado las elecciones democráticas de forma justa.
Camerún ha firmado un tratado de defensa con Rusia y ha aceptado que China realice actividades mineras, lo que ha reducido la influencia de Francia en el país, dijo.
Camerún, Benín y Guinea Bissau deberían pedir a Macron que reconsidere las sanciones comerciales de la UE a Rusia, dijo la Liga de Consumidores de Camerún. El grupo de defensa de los consumidores culpa a las sanciones de la UE de la escasez de combustible y trigo y del aumento de los precios de los alimentos en toda África.
Es probable que Macron intente reforzar la cooperación multilateral para detener la propagación del terrorismo yihadista en África Occidental, incluyendo Camerún, Benín y Togo, dijo Kulu.
Macron está acompañado por los ministros franceses de Asuntos Exteriores, Fuerzas Armadas y Relaciones Exteriores, así como por el secretario de Estado francés de Desarrollo.
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