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El presidente francés, Emmanuel Macron, hablará públicamente más tarde el miércoles, por primera vez desde que sufrió un duro golpe político cuando su partido perdió la mayoría parlamentaria.
Macron tiene previsto dar un discurso televisado a nivel nacional después de dos días de reuniones consecutivas con los líderes de los partidos rivales, en un esfuerzo por mostrar que está abierto al diálogo. Pero esos rivales parecen decididos a mantenerse en la oposición a Macron y no están dispuestos a cooperar o llegar a un acuerdo con él.
Hablará horas después de que la líder de extrema derecha Marine Le Pen hiciera una gran entrada en la Asamblea Nacional con decenas de legisladores de su partido Rally Nacional, que obtuvo un resultado histórico de 89 escaños en las elecciones del domingo.
La alianza Juntos, de Macron, es la que ha obtenido más escaños, 245, pero le faltan 44 para alcanzar la mayoría en la cámara más poderosa del Parlamento francés. La principal fuerza de la oposición es la coalición de izquierdas Nupes, creada por el incendiario Jean-Luc Melenchon, con 131 escaños.
El resultado dificultará a Macron el cumplimiento de sus promesas electorales, como las medidas para aumentar el poder adquisitivo, los recortes fiscales y el aumento de la edad mínima de jubilación de 62 a 65 años. Su Gobierno aún tiene capacidad para gobernar, pero sólo negociando con los legisladores.
El presidente conserva el control de la política exterior. Macron se dirige el jueves a una serie de cumbres mundiales que se espera se centren en la guerra de Ucrania.
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