Los Archivos Nacionales recuperaron 100 documentos con marcas clasificadas, que suman más de 700 páginas, de un lote inicial de 15 cajas recuperadas de Mar-a-Lago a principios de este año, según la correspondencia del gobierno recientemente publicada con el equipo legal de Trump.
Las cifras dejan claro el gran volumen de documentos gubernamentales secretos recuperados hace meses en la finca del ex presidente Donald Trump en Florida, mucho antes de que los funcionarios del FBI volvieran allí con una orden de registro el 8 de agosto y retiraran otros 11 conjuntos de registros clasificados. La orden también revela una investigación del FBI sobre la posible retención ilegal de los registros, así como la obstrucción de la justicia.
Las cifras de los documentos se incluyeron en una carta del 10 de mayo en la que la archivera en funciones Debra Steidel Wall le dijo a un abogado de Trump, Evan Corcoran, que la administración de Biden no honraría las reclamaciones de privilegio ejecutivo del ex presidente sobre los documentos.
Corcoran había solicitado semanas antes tiempo adicional para revisar los materiales en las cajas antes de que los Archivos los entregaran al FBI para poder determinar si algunos estaban sujetos al privilegio ejecutivo y, por lo tanto, exentos de divulgación, según la carta.
La carta se hizo pública el martes en el sitio web de la Administración Nacional de Archivos y Registros. Anteriormente, fue publicada el lunes por la noche en un sitio web lanzado por John Solomon, quien fue nombrado por Trump en junio para ser uno de sus representantes designados en los Archivos y que es un aliado de Trump y periodista conservador.
La carta del archivero dice que el Departamento de Justicia no había encontrado “ningún precedente de una afirmación de privilegio ejecutivo por parte de un ex presidente contra un presidente en funciones para evitar que este último” obtenga de los Archivos registros presidenciales que pertenecen al gobierno federal y que son necesarios para los asuntos actuales del gobierno. En consecuencia, según la carta, no se atenderán las reclamaciones de privilegio ejecutivo y el FBI tendrá acceso a los documentos en cuestión de días.
Los Archivos habían pedido al Departamento de Justicia que investigara después de decir que había localizado material clasificado entre las 15 cajas de registros que recuperó de Mar-a-Lago que, según dijo, debería haber sido entregado por Trump al final de su mandato en la Casa Blanca.
En la carta, la archivera Wall escribe que en esas cajas, los Archivos habían identificado elementos marcados como clasificados a nivel de alto secreto, así como información sobre programas de acceso especial.
Dice que los registros incluían 100 documentos con marcas clasificadas, “que comprenden más de 700 páginas” y cita un extracto de la correspondencia separada de la División de Seguridad Nacional del Departamento de Justicia en la que se dice que “el acceso a los materiales no sólo es necesario para los fines de nuestra investigación criminal en curso”, sino también para una “evaluación del daño potencial” resultante de las formas en que los documentos fueron transportados y almacenados.
Corcoran no devolvió de inmediato los mensajes en busca de comentarios sobre la carta.
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El escritor de Associated Press Farnoush Amiri en Washington contribuyó a este informe.
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Más sobre las investigaciones relacionadas con Donald Trump: https://apnews.com/hub/donald-trump
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