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La ex primera dama Melania Trump arremetió el viernes contra la prensa por informar sobre una investigación del departamento de servicios al consumidor de Florida sobre si una organización benéfica para la que supuestamente recaudó fondos estaba debidamente registrada ante las autoridades, acusando a los reporteros de “[canceling] las esperanzas y los sueños de los niños al tratar de cancelar [her]”.
A principios de esta semana, The New York Times informó de que el programa de becas “Fostering the Future” de la señora Trump -parte de la iniciativa “Be Best” que puso en marcha durante la presidencia de su marido- iba a ser el beneficiario de una recaudación de fondos de caridad a la que asistió en Naples, Florida.
Pero el Times también reveló que ninguna organización benéfica con los nombres “Be Best” o “Fostering the Future” estaba registrada en la División de Servicios al Consumidor de Florida, lo que planteó la posibilidad de que las solicitudes para el evento benéfico violaran una ley de Florida que requiere que cualquier “organización benéfica o patrocinador” se registre en el estado antes de participar en cualquier solicitud de donaciones.
Un portavoz de los servicios al consumidor de Florida dijo al Times que la agencia estaba “investigando actualmente si este suceso implica a una entidad que opera en violación del Capítulo 496 de los Estatutos de Florida”.
En respuesta, la Sra. Trump calificó la información de “inexacta, engañosa y totalmente incorrecta”, y dijo que una escuela de Oklahoma que inicialmente había acordado aceptar donaciones de ella para el programa de becas “Fostering the Future” se había echado atrás”.
Acusó al consejo de administración de la escuela de tomar una “decisión motivada políticamente”, y dijo que estaba “decepcionada pero no sorprendida”.
“No es la primera vez que la política se interpone en mi misión de apoyar a los niños”, dijo, y añadió que los posibles socios se habían negado a participar en su iniciativa “Be Best” mientras ella estaba en la Casa Blanca.
A continuación, la Sra. Trump culpó a la prensa de sus dificultades.
“Los medios de comunicación han creado una narrativa según la cual estoy tratando de actuar de manera ilegal o poco ética. Esa descripción es simplemente falsa y afecta negativamente a los niños que espero apoyar”, dijo.
La ex primera dama añadió que cualquiera que, según sus palabras, “ataque” sus iniciativas o “cree[s] la apariencia de impropiedad” son “literalmente asesinos de sueños”, pero se comprometió a seguir apoyando a “nuestros niños” y a “hacer lo que sea necesario”, al tiempo que “sigue siendo positiva frente a la negatividad”.
Los problemas benéficos de la Sra. Trump no son las primeras dificultades que un miembro de su familia ha tenido para establecer o dirigir una organización sin ánimo de lucro.
En 2018, la entonces fiscal general del estado de Nueva York, Barbara Underwood, presentó una demanda contra el marido de la señora Trump, el entonces presidente Donald Trump, y sus tres hijastros mayores -Donald Trump Jr, Eric Trump e Ivanka Trump-, así como contra la fundación benéfica homónima de su marido, alegando que la fundación había incurrido en “un patrón escandaloso de ilegalidad” en su funcionamiento.
El ex presidente acabó admitiendo que utilizó la fundación para ayudar a sus negocios y a su campaña política y pagó 2 millones de dólares en concepto de indemnización. También se ordenó que él y sus hijos recibieran una formación obligatoria sobre las responsabilidades de los miembros de los consejos de administración de las organizaciones benéficas.
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