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Rusia quiere dividir Ucrania en dos, al igual que Corea del Norte y del Sur, dijeron el domingo altos funcionarios de inteligencia militar en Kiev, y prometieron una guerra de guerrillas “total” para evitar cualquier división del país.
Las advertencias se produjeron justo cuando el líder de una región separatista del este de Ucrania dice que quiere celebrar un referéndum para unirse a Rusia.
Leonid Pasechnik, jefe de la autoproclamada República Popular de Luhansk, dijo que podría celebrar una votación “en el tiempo más cercano”, preguntando a los votantes si apoyan que la región forme parte de Rusia.
Rusia ha apoyado a los rebeldes separatistas de Luhansk y de las regiones vecinas de Donetsk desde que estalló allí una insurgencia en 2014, poco después de la anexión de la península de Crimea por parte de Moscú.
Y justo antes de la invasión de Ucrania el 24 de febrero, Moscú reconoció su independencia.
Los habitantes de Crimea votaron abrumadoramente para romper con Ucrania y unirse a Rusia, una votación que gran parte del mundo se negó a reconocer.
En respuesta, Kyrylo Budanov, jefe de la inteligencia militar ucraniana, dijo que Moscú estaba tratando de dividir a Ucrania por la mitad.
“De hecho, es un intento de crear Corea del Norte y del Sur en Ucrania”, dijo Budanov. Predijo que el ejército ucraniano haría retroceder a las fuerzas rusas.
“Además, pronto comenzará la temporada de una guerrilla ucraniana total. Entonces quedará un escenario relevante para los rusos, cómo sobrevivir”, dijo.
El portavoz del Ministerio de Asuntos Exteriores ucraniano también descartó hablar de cualquier referéndum en el este de Ucrania.
“Todos los falsos referendos en los territorios temporalmente ocupados son nulos y no tendrán ninguna validez legal”, dijo Oleg Nikolenko Reuters.
El viernes, los líderes militares rusos dijeron que centrarían sus esfuerzos de guerra en arrancar la región oriental de Ucrania, Donbas, del control ucraniano, en un aparente cambio de táctica.
En las conversaciones en curso con Ucrania, Moscú también le ha instado a reconocer la soberanía de Rusia sobre Crimea y la independencia de las regiones de Donetsk y Luhansk. La declaración de Pasechnik podría anunciar un cambio en la posición rusa.
Mientras tanto, el presidente ucraniano, Volodymyr Zelensky, ha acusado a Occidente de falta de coraje y ha hecho una petición de aviones de combate y tanques para sostener una defensa en un conflicto que se ha convertido en una guerra de desgaste.
El Sr. Zelensky arremetió contra el “ping-pong” de Occidente sobre quién y cómo debe entregarnos aviones y otras armas defensivas” mientras los ataques con misiles rusos matan y atrapan a civiles.
“Hoy he hablado con los defensores de Mariupol. Estoy en contacto permanente con ellos. Su determinación, heroísmo y firmeza son asombrosos”, dijo Zelensky en un discurso por vídeo a primera hora del domingo, refiriéndose a la ciudad sureña asediada que ha sufrido algunas de las mayores privaciones y horrores de la guerra.
“Si los que llevan 31 días pensando en cómo entregar decenas de aviones y tanques tuvieran un uno por ciento de su valor”.
La invasión rusa de Ucrania se ha estancado en muchas zonas, tambaleándose ante la resistencia ucraniana reforzada por las armas de Estados Unidos y otros aliados occidentales.
La ayuda militar occidental no ha incluido hasta ahora aviones de combate. La propuesta de transferir aviones polacos a Ucrania a través de EE.UU. fue desechada en medio de la preocupación de la OTAN por verse envuelta en un conflicto con Rusia.
“Entonces, ¿quién manda en la comunidad euroatlántica? ¿Sigue siendo Moscú, gracias a sus tácticas de miedo?”. dijo Zelensky. “Nuestros socios deben aumentar su ayuda a Ucrania”.
El Ministerio de Defensa del Reino Unido dijo el domingo que el campo de batalla en todo el norte de Ucrania sigue siendo en gran parte estático, ya que los contraataques locales dificultan los intentos rusos de reorganizar sus fuerzas.
El MoD dijo que las tropas rusas parecían estar tratando de rodear a las fuerzas ucranianas que se enfrentan directamente a las regiones separatistas en el este del país.
El domingo, el portavoz del Ministerio de Defensa ruso, el general de división Igor Konashenkov, dijo que había utilizado misiles de crucero lanzados desde el aire para atacar un depósito de combustible y una planta de defensa en Lviv.
Dijo que otro ataque con misiles lanzados desde el mar destruyó un depósito de misiles de defensa aérea en Plesetske, al oeste de la capital ucraniana, Kiev.
Los ataques se produjeron mientras Biden concluía una visita a Polonia, donde se reunió con los ministros de Asuntos Exteriores y de Defensa de Ucrania, visitó a las tropas estadounidenses y vio a los refugiados de la guerra.
Antes de marcharse, condenó enérgicamente al presidente ruso Vladimir Putin: “Por el amor de Dios, este hombre no puede permanecer enpoder”.
La Casa Blanca aclaró que no estaba pidiendo un cambio inmediato de gobierno en Moscú.
El secretario de Estado estadounidense, Antony Blinken, dijo el domingo que Washington no tenía ninguna estrategia de cambio de régimen y que Biden simplemente había querido decir que Putin no podía tener “poder para hacer la guerra” contra Ucrania o cualquier otro lugar.
El portavoz del Kremlin, Dmitry Peskov, dijo que el futuro de Rusia “no lo decide Biden”.
“Este discurso -y los pasajes que conciernen a Rusia- es asombroso, por usar palabras educadas”, añadió. “No entiende que el mundo no se limita a Estados Unidos y a la mayor parte de Europa”.
El presidente francés, Emmanuel Macron, trató de distanciarse de los comentarios de Biden. “No utilizaría este tipo de palabras porque sigo manteniendo conversaciones con el presidente Putin”, dijo al canal de televisión France 3.
El ministro de Asuntos Exteriores de Francia, Jean-Yves Le Drian, advirtió el domingo que la ciudad ucraniana asediada de Mariupol se está convirtiendo en un “segundo Alepo” y que la “guerra de asedio” de Rusia contra las ciudades debería inducir a una “culpabilidad colectiva”. “Las poblaciones civiles son masacradas, aniquiladas, el sufrimiento es horrible”, dijo un Le Drian visiblemente enfadado.
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