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La UE ha reforzado urgentemente la seguridad y ha advertido de que habrá represalias tras los daños “altamente sospechosos” sufridos por los gasoductos submarinos Nord Stream.
Un funcionario occidental dijo que las fugas en el gasoducto eran un hecho muy grave, pero que se necesita una investigación completa para establecer lo sucedido.
“En cuanto a los gasoductos, está claro que esto parece muy grave. Las múltiples explosiones al mismo tiempo – es muy grave, y va a tener que ser investigado”, dijo el funcionario occidental, bajo condición de anonimato.
“Definitivamente parece muy sospechoso, pero creo que tenemos que establecer los hechos y luego atribuir”.
Mientras tanto, los funcionarios de la UE han advertido de represalias en forma de una “respuesta robusta y unida” para cualquier nuevo ataque a las redes energéticas de Europa.
“Toda la información disponible indica que esas filtraciones son el resultado de un acto deliberado”, dijo Josep Borrell, jefe de la política exterior de la UE, en nombre de los 27 Estados miembros.
Y continuó: “Cualquier perturbación deliberada de las infraestructuras energéticas europeas es absolutamente inaceptable y se responderá con una respuesta contundente y unida”.
La advertencia se produce en un momento en el que el continente está luchando contra una crisis energética y del coste de la vida que ya ha provocado enormes recortes en el uso del gas y la electricidad, tanto por parte del Estado como de los hogares, mientras los países de la UE intentan independizarse energéticamente de Rusia.
El martes se descubrieron explosiones en el Mar Báltico antes de que se descubrieran inusuales fugas en dos gasoductos submarinos que recorren 230 kilómetros (764 millas) desde Rusia a través del Mar Báltico hasta Alemania.
Las tres fugas se produjeron en los gasoductos Nord Stream 1 y 2, que están llenos de gas natural pero que no suministran el combustible a Europa.
Los daños significan que es poco probable que los gasoductos puedan transportar gas a Europa este invierno, incluso si surgiera la voluntad política de ponerlos en marcha, según los analistas.
La primera explosión se registró a primera hora del lunes al sureste de la isla danesa de Bornholm.
Una segunda explosión más fuerte al noreste de la isla esa noche fue equivalente a un terremoto de magnitud 2,3. Las estaciones sísmicas de Dinamarca, Noruega y Finlandia también registraron las explosiones.
El Sr. Borrell dijo que la UE apoyará cualquier investigación sobre los daños, y “tomará nuevas medidas para aumentar nuestra resistencia en materia de seguridad energética”.
El Secretario General de la OTAN, Jens Stoltenberg, también atribuyó las filtraciones en los gasoductos Nord Stream a actos de sabotaje y dijo que había hablado de la protección de las infraestructuras críticas en los países de la OTAN con el ministro de Defensa danés.
“Discutido el sabotaje en los oleoductos NorthStream con el ministro de Defensa Morten Badskov”, dijo en Twitter.
“Abordamos la protección de las infraestructuras críticas en los países de la OTAN”.
La primera ministra danesa, Mette Frederiksen, ha afirmado que “la evaluación de las autoridades es que se trata de acciones deliberadas, no de accidentes”.
Pero dijo que “no hay información que indique quién podría estar detrás”.
Frederiksen rechazó la sugerencia de que el incidente fuera un ataque a Dinamarca, diciendo que las fugas se produjeron en aguas internacionales.
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