La condición de miles de residentes de la ciudad asediada de Mariupol, en Ucrania, está “empeorando” al quedarse sin luz, agua, medicinas o comunicación debido a los continuos e incesantes bombardeos de Rusia, ha afirmado la inteligencia militar del Reino Unido en su última actualización.
“La situación humanitaria en la ciudad está empeorando”, dijo el miércoles el Ministerio de Defensa del Reino Unido.
“La mayoría de los 160.000 residentes que quedan no tienen luz, comunicación, medicamentos, calefacción o agua. Las fuerzas rusas han impedido el acceso de la ayuda humanitaria, probablemente para presionar a los defensores para que se rindan”, añadió.
La declaración se produce después de que el presidente ucraniano, Volodymyr Zelensky, acusara a Rusia de bloquear la ayuda humanitaria a Mariupol y dijera que Moscú estaba ganando tiempo para “limpiar” las pruebas de abusos contra los derechos humanos.
Citó datos del Servicio de Seguridad de Ucrania (SBU), la agencia de seguridad del país, según los cuales las fuerzas rusas “planean reunir los cuerpos de los residentes de Mariupol asesinados por los propios rusos en un lugar y presentarlos como víctimas masivas de las tropas ucranianas”.
Hizo estas declaraciones durante una entrevista con la televisión turca Haberturk.
La ciudad portuaria de Mariupol, un puerto de importancia estratégica en el Mar de Azov que forma parte del Mar Negro, está rodeada por las fuerzas rusas desde principios de marzo.
La ciudad ha sido bombardeada sin cesar por la artillería, los cohetes y los misiles, mientras las fuerzas ucranianas decían que llevaban más de 40 días rechazando los ataques a la ciudad.
Según los informes, más del 90% de la ciudad ha sufrido daños y se ha cortado el acceso a la electricidad, la calefacción, el agua dulce, los alimentos y los suministros médicos.
Mientras tanto, el secretario de Sanidad británico, Sajid Javid, dijo que el mundo debe “actuar para detener los asesinatos en masa” en Ucrania, al comparar el aumento de las matanzas de civiles con el genocidio de 1995 en Bosnia.
“Esto es un asesinato en masa a una escala sin precedentes en Europa. Creo que no habíamos visto algo así desde 1995”, declaró a la BBC.
“No quiero estar conmemorando otro genocidio en Europa dentro de unos años. Tenemos el poder, el mundo tiene el poder de detener esto, y debe actuar”, dijo Javid.
En lo que se considera la peor atrocidad humanitaria de Europa desde la Segunda Guerra Mundial, las fuerzas serbobosnias invadieron una “zona segura” de la ONU en Srebrenica y masacraron a los bosnios musulmanes en julio de 1995.
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