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Las autoridades de Nueva York han declarado el estado de emergencia por la poliomielitis al detectarse el virus en muestras de aguas residuales en un cuarto condado, apenas unos meses después de que el estado anunciara el primer caso en suelo estadounidense en casi una década.
La gobernadora Kathy Hochul anunció el viernes que había emitido una declaración de desastre de un mes de duración para el estado en un intento de reforzar las tasas de vacunación contra el virus.
La medida se produjo pocas horas después de que las autoridades del condado de Nassau confirmaran que habían detectado rastros positivos del poliovirus en sus muestras de aguas residuales.
Esto convierte al condado en el cuarto en el que se ha detectado el virus paralizante, uniéndose a los condados de Rockland, Orange y Sullivan, así como a la ciudad de Nueva York, y reforzando la preocupación de que se esté extendiendo por el Empire State.
El estado comenzó a investigar la posible presencia de poliomielitis en las aguas residuales cuando un adulto no vacunado contrajo la enfermedad en julio y se quedó paralizado.
Esto marcó el primer caso conocido del virus en los EE.UU. en casi una década.
El individuo, del condado de Rockland, no había viajado al extranjero durante el periodo de incubación, lo que llevó a los funcionarios a la conclusión de que lo contrajo en suelo estadounidense.
La poliomielitis había sido declarada eliminada en EE.UU. en 1979, tras la vacunación generalizada contra el virus.
Sin embargo, las tasas de vacunación han disminuido en los últimos años, en parte debido a la pandemia de Covid-19 y al escepticismo que rodea a las vacunas, dijo la oficina del gobernador en su anuncio.
Ahora, menos de ocho de cada diez niños menores de dos años en el estado de Nueva York han recibido la vacuna contra la polio.
En varios condados, la tasa de vacunación es mucho más baja, con sólo el 60 por ciento de los residentes vacunados en el condado de Rockland y el 58 por ciento en el condado de Orange, según las cifras del departamento de salud del estado.
Ahora, se ha detectado el poliovirus en muestras de aguas residuales de la ciudad de Nueva York y de los condados de Rockland, Orange, Sullivan y Nassau.
Las autoridades advirtieron que los residentes no vacunados que viven en esas zonas corren el mayor riesgo de contraer la enfermedad.
La declaración de desastre permite al gobernador ampliar su red de vacunación en todo el estado.
Estará vigente durante un mes hasta el 9 de octubre.
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