Los ciudadanos neozelandeses que regresen a la nación insular ya no tendrán que aislarse, dijo el lunes la primera ministra, Jacinda Ardern, al anunciar que el miércoles se eliminará la estricta normativa Covid-19.
“Sé que esta será una buena noticia para los miembros de nuestro equipo en el extranjero, deseosos de viajar a casa para ver a sus seres queridos lo antes posible”, dijo Ardern.
“Estamos deseando verlos”.
Los viajeros extranjeros que planean visitar Nueva Zelanda siguen sin poder entrar en el país.
La primera ministra dijo que su Gabinete estaba considerando reabrir las fronteras por completo para los turistas de Australia antes de la fecha prevista de julio.
Nueva Zelanda está estudiando la posibilidad de abrir las fronteras por completo para las personas de otras partes del mundo a partir de octubre, dijo la Sra. Ardern.
Los viajeros deberán presentar un informe Covid negativo antes de salir y después de entrar en Nueva Zelanda, según las nuevas normas.
Aislada del resto del mundo desde el inicio de la pandemia como medida estratégica, es la primera vez que Nueva Zelanda suaviza sus restricciones fronterizas.
El país había anunciado el fin de la regulación de la cuarentena para los viajeros que llegaban, en la que se les pedía que se aislaran en habitaciones de hotel gestionadas por el ejército.
Sin embargo, los viajeros no vacunados siguen estando obligados a aislarse en las instalaciones.
Las normas suavizadas y anunciadas el lunes forman parte de un plan de cinco pasos de la administración de la Sra. Ardern en su intento de infundir normalidad junto al brote de Covid.
Las duras restricciones impuestas por el gobierno neozelandés se encuentran entre las normas fronterizas más estrictas, que mantuvieron al país del Pacífico sudoccidental comparativamente ajeno al aumento de casos y muertes por Covid.
Sin embargo, los líderes de la oposición y los expertos de la industria comercial criticaron la medida por las pérdidas económicas a las que se enfrenta el país.
Nueva Zelanda generaba el 20% de sus ingresos en el extranjero a través del turismo internacional, pero se redujo drásticamente tras el inicio de la pandemia en 2020.
Después de no haberse visto afectado durante más de un año, los casos de Covid en Nueva Zelanda han comenzado a alcanzar un pico con cerca de 15.000 infecciones registradas por día con la variante Omicron altamente contagiosa que se está extendiendo.
Esta cifra es al menos siete veces superior a la registrada hace tan solo 10 días.
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