Otra delegación del Congreso estadounidense en Taiwán en medio de las tensiones

Otra delegación del Congreso estadounidense visita Taiwán en medio de las tensiones con China por sus reivindicaciones sobre la isla autogobernada.

Desde la visita de la presidenta de la Cámara de Representantes de Estados Unidos, Nancy Pelosi, a principios de agosto, no han dejado de llegar visitantes estadounidenses para reunirse con funcionarios taiwaneses. Desde entonces, China ha intensificado su acoso militar a Taiwán, enviando diariamente buques de guerra, aviones de combate e incluso drones hacia la isla.

La delegación bipartidista de ocho miembros tiene previsto reunirse el jueves con la presidenta de Taiwán, Tsai Ing-wen.

Está encabezada por la demócrata de Florida Stephanie Murphy, que se encuentra entre los legisladores que presentaron un proyecto de ley que permitiría a Estados Unidos prestar armas para apoyar a Taiwán, de forma similar a un proyecto de ley que se aprobó para prestar armas a Ucrania. La semana pasada, la administración Biden aprobó una venta de armas a Taiwán por valor de 1.000 millones de dólares.

Los otros visitantes son el demócrata hawaiano Kaiali’i Kahele y los republicanos Scott Franklin de Florida, Joe Wilson de Carolina del Sur, Andy Barr de Kentucky, Darrell Issa de California, Claudia Tenney de Nueva York y Kat Cammack de Florida.

Pelosi fue el miembro de más alto nivel del gobierno estadounidense que visitó Taiwán en 25 años. China respondió con ejercicios militares prolongados que incluyeron el lanzamiento de misiles sobre la isla y el envío de barcos a través de la línea media del Estrecho de Taiwán, que durante mucho tiempo fue un amortiguador entre las dos partes. Algunos de los misiles cayeron en la zona económica exclusiva de Japón.

China considera que las visitas extranjeras de alto nivel a la isla son una injerencia en sus asuntos y un reconocimiento de facto de la soberanía taiwanesa. Los recientes ejercicios militares de China fueron vistos por algunos como un ensayo de una futura acción militar contra la isla, que según los líderes militares estadounidenses podría llegar en los próximos años.

Tras el viaje de Pelosi, un senador estadounidense y otra delegación del Congreso visitaron Taiwán, así como funcionarios públicos de Japón y Palau. Además, los gobernadores de Arizona e Indiana realizaron visitas centradas en los semiconductores, industria que dominan las empresas taiwanesas.

Los políticos estadounidenses han calificado sus visitas como una muestra de apoyo a la isla.