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Remington se convierte en el primer fabricante de armas considerado responsable de un tiroteo masivo tras un acuerdo de 73 millones de dólares con las familias de Sandy Hook

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Remington Arms acordó pagar 73 millones de dólares para resolver una demanda de responsabilidad presentada por las familias de las víctimas de Sandy Hook, lo que supone la primera vez que un fabricante de armas es considerado responsable de un tiroteo masivo.

La demanda fue presentada contra Remington hace casi ocho años por las familias de cinco adultos y cuatro niños que murieron en el tiroteo. En el tiroteo de 2012 se utilizó un rifle semiautomático Bushmaster XM15-E2s.

El rifle es la versión de Remington del AR-15.

“Los demandantes en esta acción por la presente dan aviso de que un acuerdo de solución se ha ejecutado entre las partes”, dijo una presentación judicial.

Según ABC News, se espera que las familias den una conferencia de prensa para hablar del acuerdo.

Lenny Pozner y Veronique De La Rosa, cuyo hijo Noah murió en el tiroteo, emitieron un comunicado el martes después del fallo.

“Nuestra pérdida es irreversible, y en ese sentido este resultado no es ni redentor ni reparador. En un momento tuvimos a este deslumbrante y enérgico niño de 6 años, y al siguiente todo lo que nos quedaba eran ecos del pasado, fotografías de un niño perdido que nunca crecerá, calendarios que marcan un nuevo y horrible aniversario, una tumba solitaria y trozos de la vida de Noah guardados en una mochila y cajas.”

Dijeron que, aunque ha pasado casi una década desde el tiroteo, siguen sintiendo que falta un trozo de sus vidas.

“Cada día es una constatación de que debería estar ahí, y no está. Lo que se ha perdido sigue estando perdido”, dijeron. “Sin embargo, la resolución proporciona una medida de responsabilidad en una industria que hasta ahora ha operado con impunidad. Por ello, estamos agradecidos”.

Según la demanda, las familias argumentaron que Remington mostró negligencia al confiar a los consumidores civiles armas construidas para aplicaciones militares y policiales. Además, argumentaron que Remington violó la Ley de Prácticas Comerciales Desleales de Connecticut al comercializar sus rifles a “jóvenes de alto riesgo.”

Remington se declaró en quiebra en 2020. Antes del acuerdo, la empresa sostenía que los argumentos de las familias eran nulos en virtud de la Ley de Protección del Comercio Legal de Armas, que generalmente concede a los fabricantes de armas inmunidad de responsabilidad civil en caso de que un tercero utilice sus productos para delinquir.

La sentencia será probablemente una noticia desagradable para los fabricantes de armas. Todos los estados tienen una ley de protección del consumidor similar a la Ley de Prácticas Comerciales Desleales de Connecticut, lo que significa que las víctimas de tiroteos masivos en otros estados podrían iniciar demandas contra los fabricantes de armas utilizando las mismas tácticas que los padres de Sandy Hook.

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