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El ex abogado personal de Donald Trump, Rudy Giuliani, pareció admitir el jueves que el señor Trump tenía documentos clasificados que son propiedad del gobierno de Estados Unidos, durante una aparición en la cadena de televisión derechista Newsmax.
El Sr. Giuliani, que actualmente se enfrenta a la inhabilitación por hacer declaraciones falsas en el curso de su representación del ex presidente durante su impulso para anular las elecciones de 2020, estaba tratando de defender al Sr. Trump cuando dijo que la Ley de Espionaje – la ley que los agentes del FBI dijeron que podría haber sido violada cuando pidieron una orden para registrar la casa del Sr. Trump – “realmente no se trata de tomar los documentos”.
“Se trata de destruirlos u ocultarlos o darlos al enemigo. No se trata de llevárselos y ponerlos en un lugar más o menos tan seguro como en el que estaban en primer lugar”, dijo.
El exalcalde de Nueva York también dijo que los funcionarios del Departamento de Justicia que investigan los documentos clasificados que los agentes del FBI encontraron en la casa del señor Trump “quieren hacerlo responsable de haber tomado documentos clasificados y preservar [sic] los”.
La sugerencia del Sr. Giuliani de que la Ley de Espionaje no castigaba el hecho de “sacar” documentos clasificados de las instalaciones seguras donde legalmente deben conservarse, provocó el ridículo inmediato de un destacado experto en leyes de seguridad nacional, el abogado Bradley Moss.
Escribiendo en Twitter, el Sr. Moss dijo: “Esto es 100% falso”.
De hecho, la sección del código penal de los Estados Unidos a la que se hace referencia en la solicitud del FBI de una orden de registro en la casa del Sr. Trump en Palm Beach, Florida, hace que sea un delito para cualquier persona “encargada o que tenga posesión o control legal de cualquier documento … relacionado con la defensa nacional” “[permit] se sustraiga el mismo de su debido lugar de custodia” con “negligencia grave”.
La afirmación del exabogado de Trump de que el expresidente intentaba preservar los documentos alejándolos de los Archivos Nacionales -donde se suponía que se depositarían todos los registros de su anterior administración cuando su mandato expirara en enero de 2021- es solo la última de una serie de excusas y explicaciones cambiantes sobre por qué los agentes del FBI encontraron al menos 11 cajas de documentos pertenecientes al gobierno durante el registro de la casa del señor Trump.
Al día siguiente del registro, el Sr. Trump afirmó inicialmente que los agentes del FBI podrían haber “plantado” pruebas de conducta delictiva en su casa. Después de que surgieran informes de que el FBI estaba buscando documentos altamente clasificados relacionados con armas nucleares, el Sr. Trump se burló de los informes como parte de un “engaño” y negó que hubiera documentos clasificados en su residencia.
Después de que se desvelara el recibo que el FBI entregó a su abogado, en el que se mostraba que los agentes recuperaron documentos marcados como que contenían “información sensible compartimentada” -uno de los niveles más altos de clasificación-, un periodista conservador aliado del expresidente afirmó que tenía la “orden permanente” de desclasificar cualquier documento que se llevara del Ala Oeste durante su mandato.
El tercer asesor de seguridad nacional del señor Trump, el embajador John Bolton, dijo al New York Times que la afirmación de una orden de desclasificación permanente era “casi seguramente una mentira”.
“Cuando alguien empieza a urdir mentiras como ésta, muestra un verdadero nivel de desesperación”, añadió.
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