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Moscú ha afirmado que publicará pruebas de que las tropas especializadas británicas estuvieron involucradas en un ataque con drones durante el fin de semana a la Flota del Mar Negro de Rusia.
El Ministerio de Defensa británico rechazó la acusación de Rusia como una “historia inventada” que dice “más sobre las discusiones dentro del gobierno ruso que sobre Occidente”.
Andrei Kelin, el embajador ruso en el Reino Unido, dijo que publicará sus pruebas “muy pronto”, añadiendo que el Reino Unido está “demasiado metido” con su participación en Ucrania.
Dijo Sky News: “Sabemos perfectamente de la participación de especialistas británicos en el entrenamiento, preparación y ejecución de planes contra la infraestructura rusa y la flota rusa en el Mar Negro. Sabemos que se ha hecho”, dijo.
“Es peligroso. Puede llevarnos a la línea de, yo diría, no retorno -el retorno siempre es posible-, pero debemos evitar la escalada.”
Un portavoz del gobierno británico dijo que las acusaciones rusas eran un intento de “distraer la atención” de su invasión ilegal de Ucrania y de sus continuas pérdidas en el campo de batalla.
“No pensamos dar un comentario continuo sobre estas acusaciones; no es ningún secreto que el Reino Unido ha tomado la iniciativa pública en nuestro apoyo a Ucrania – esto ha sido duradero desde la anexión ilegal de Crimea por parte de Rusia en 2014”, añadió el portavoz.
El secretario de Defensa, James Cleverly, también se desentendió de la acusación, ya que tuiteó: “El mundo ve a través de la continua campaña de desinformación de Putin”.
Cleverly también se refirió al informe del organismo de control nuclear de la ONU sobre las afirmaciones de Moscú de que Ucrania estaba planeando una “bomba sucia”.
“Las acusaciones infundadas de Rusia han sido escuchadas, investigadas y rechazadas. Acojo con satisfacción el informe independiente del OIEA que no encuentra actividades nucleares no declaradas por parte de Ucrania.”
La cadena de acusaciones de gran alcance se cree que es indicativa de la ofensiva de debilitamiento de Rusia, ya que la guerra parece estar acercándose a un punto de inflexión.
La situación es tan grave que las fuerzas rusas amenazan con abatir a sus propios soldados en retirada para impulsar los objetivos militares de Moscú, según el Ministerio de Defensa británico.
Añadió que la táctica de disparar a los desertores “probablemente atestigua la baja calidad, la baja moral y la indisciplina de las fuerzas rusas”.
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