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El canciller Olaf Scholz dijo el jueves que Alemania tendrá que hacer un mejor trabajo para tomar medidas drásticas contra la “migración irregular” y deportar a aquellos que no residen legalmente en el país.
No obstante, Scholz afirmó que Alemania seguirá ofreciendo protección a los ucranianos que huyen de la guerra de Rusia.
“Nuestra responsabilidad ante esta terrible guerra de agresión incluye naturalmente también proporcionar protección a los ciudadanos ucranianos en la Unión Europea”, dijo Scholz en un discurso ante el Parlamento, añadiendo que “todos los niveles de gobierno han estado haciendo un gran trabajo durante más de un año – especialmente las ciudades, condados y municipios.”
Más de un millón de ucranianos han encontrado refugio en Alemania desde que Rusia invadió su país hace más de un año. Además, más de 200.000 personas procedentes de países como Siria, Afganistán y Turquía han solicitado asilo en 2022.
Durante meses, las comunidades locales han dicho que están luchando para albergar a los muchos recién llegados a Alemania y han estado pidiendo al gobierno federal que les ayude con alojamiento, escolarización y apoyo financiero para todos.
Mientras que los ucranianos han sido en general bien acogidos por los alemanes, los solicitantes de asilo de Oriente Medio o África han experimentado más hostilidad, y el número de ataques a centros de asilo ha vuelto a aumentar en el último año.
Scholz subrayó que “las respuestas efectivas a los retos de la huida y la migración sólo serán posibles mediante un marco europeo.”
Alemania ha sido durante mucho tiempo uno de los destinos más populares para los inmigrantes en Europa, y el gobierno ha estado presionando para que los que vienen se distribuyan por Europa de forma más justa – pero sin mucho éxito.
Scholz también subrayó que Alemania tiene que acelerar la deportación de quienes ven rechazadas sus solicitudes de asilo.
“Los que no tienen derecho de residencia en Alemania deben regresar rápidamente a su país de origen”, dijo. “Eso aún no funciona suficientemente bien”.
A finales del año pasado, unas 240.000 personas estaban tramitando el asilo y unas 168.000 habían sido rechazadas como solicitantes de asilo y se vieron obligadas a abandonar el país, según el grupo Mediendienst Integration, que investiga la migración en Alemania. Sin embargo, sólo 12.945 personas obligadas a abandonar Alemania fueron finalmente deportadas en 2022.
Además de acelerar las deportaciones, Scholz también dijo que el país tendría que mejorar la represión de la migración irregular, pero no entró en detalles sobre cómo hacerlo.
“Queremos reducir la migración irregular”, dijo el canciller. “Queremos que menos personas se pongan en manos de contrabandistas y en rutas de escape que pongan en peligro sus vidas”.
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