¿Se enfrenta Corea del Norte a una crisis alimentaria?

Kim Jong Un quiere reforzar su control sobre la agricultura norcoreana para aumentar la producción de grano, según informan los medios estatales. Pero los expertos dicen que no hará mucho para hacer frente a un empeoramiento de la escasez de alimentos.

Las perspectivas de resolver rápidamente la crisis de inseguridad alimentaria son escasas, ya que Corea del Norte dedica gran parte de sus escasos recursos a su programa nuclear.

Aunque los expertos creen que la situación alimentaria es la peor que se ha vivido bajo los 11 años de gobierno de Kim, siguen afirmando que no ven signos de hambruna inminente ni de muertes masivas.

¿Cuál es la situación dentro de Corea del Norte?

Las dificultades económicas crónicas y la inseguridad alimentaria del hermético régimen se han agravado con el endurecimiento de las sanciones de Naciones Unidas, la pandemia de Covid que diezmó su limitado comercio exterior y su propia mala gestión.

La producción de cereales de Corea del Norte en 2022 se estimó en 4,5 millones de toneladas, un descenso del 3,8% respecto al año anterior, según evaluaciones surcoreanas. En la década anterior, su producción anual se estimaba entre 4,4 y 4,8 millones de toneladas. La agencia de espionaje surcoreana ha afirmado que Corea del Norte necesita 5,5 millones de toneladas de grano para alimentar a sus 25 millones de habitantes cada año.

Los sistemas de racionamiento estatales siguen en gran parte rotos desde que una hambruna paralizante matara a unos cientos de miles de personas a mediados de la década de 1990. Desde entonces, el país ha tolerado algunos niveles de actividades de mercado abierto, una medida que, según los expertos, ha ayudado al Norte a lograr un crecimiento económico lento y modesto, pero que podría llegar a suponer una amenaza para su liderazgo autoritario por parte de la familia Kim.

La escasez de alimentos se ha visto agravada por los intentos infructuosos de suministrar grano a través de instalaciones estatales, al tiempo que se restringían las transacciones privadas en los mercados. Otros factores atribuidos a la escasez de alimentos son la disminución de los ingresos personales y el fuerte descenso de las compras no oficiales de grano a China debido a las restricciones impuestas por la pandemia.

“Los participantes en el mercado siguen actuando con mucha cautela, por lo que el volumen de grano en los mercados no ha aumentado mucho”, afirmó Kwon Tae-jin, economista jefe del Instituto GS&J de Corea del Sur. “Si las autoridades ven los mercados de forma negativa, no podrán recuperarse adecuadamente”.

¿Qué intenta hacer Kim Jong Un al respecto?

Durante una reunión del gobernante Partido de los Trabajadores que terminó el miércoles, Kim dijo que su gobierno considera el desarrollo agrícola como un asunto de importancia “estratégica” y que los objetivos agrícolas deben ser resueltos sin falta, según la oficial Agencia Central de Noticias de Corea.

“Para alcanzar el gigantesco objetivo a largo plazo del desarrollo rural, es necesario fortalecer decisivamente la dirección del partido sobre el sector agrícola y mejorar el trabajo del partido rural”, se citó a Kim.

Kim también ordenó a los funcionarios que superaran la “asimetría no especificada en la orientación sobre la agricultura” y se concentraran en aumentar los rendimientos agrícolas. Dijo que las autoridades provinciales, municipales y de condado deben impulsar su orientación sobre la agricultura.

La KCNA no detalló cómo Kim quiere reforzar la orientación de su gobierno sobre la agricultura. Pero los expertos dicen que las instrucciones de Kim fueron una reafirmación de su impulso para restaurar los elementos de una economía planificada de estilo socialista – en virtud del cual una autoridad central controla el mercado en lugar de los participantes – en el suministro de granos.

“En nuestra opinión, están retrocediendo y volviendo al pasado”, dijo Kwon. “Para resolver el problema alimentario, deberían dejar que los mercados desempeñaran un papel más importante. Pero prefieren volver a una economía planificada”.

Lim Eul-chul, profesor del Instituto de Estudios del Lejano Oriente de la Universidad Kyungnam de Seúl, dijo que la última reunión norcoreana tenía como objetivo revisar los avances en las estrategias a largo plazo existentes para mejorar la producción nacional de alimentos, recordar a los funcionarios los objetivos relacionados y discutir las formas de ponerlos en práctica.

Pero dijo que aún no se habían descrito nuevas estrategias o direcciones significativas.

Las reuniones anteriores se centraron sobre todo en el programa nuclear del país o en las rivalidades con Estados Unidos y Corea del Sur. La celebración de una reunión plenaria del Comité Central del partido centrada en la agricultura podría ser un reconocimiento de que la situación alimentaria es grave. Sin embargo, algunos expertos afirman que el país también pretende mejorar la imagen de Kim como líder que se preocupa por su pueblo e impulsar el apoyo interno a su campaña para ampliar su arsenal nuclear.

Durante la reunión, Kim pidió que se acelere la construcción de nuevos sistemas de riego que ayuden al país a hacer frente a las condiciones meteorológicas extremas provocadas por el cambio climático. Entambién pidió a los fabricantes que construyeran y suministraran máquinas agrícolas más eficientes y a los trabajadores que aceleraran sus esfuerzos para convertir más tierras de marea en tierras de cultivo.

Kim dijo que todos los sectores y unidades estatales deben proporcionar “apoyo y asistencia mental y moral, material y técnica a las comunidades rurales”. Reiteró sus llamamientos a una mayor unidad interna detrás de su liderazgo para alcanzar los objetivos agrícolas.

“Es difícil ser optimista sobre el suministro de alimentos mientras Pyongyang insista en implantar un socialismo al estilo norcoreano y aislar al país del comercio y la ayuda internacionales, al tiempo que desarrolla misiles nucleares”, declaró Leif-Eric Easley, profesor de la Universidad Ewha de Seúl.

Aunque a Corea del Norte le falta alrededor de un millón de toneladas de grano para alcanzar los niveles anuales suficientes, Lim dijo que tales grados de escasez no han provocado hambrunas masivas en el pasado. Kwon dijo que todavía hay alimentos disponibles en los mercados, aunque a precios caros.

“Es como si gente muy pobre se estuviera muriendo de hambre, pero el gobierno no les dejara morir de hambre. Las cosas podrían seguir así”, dijo Kwon.

Associated Press contribuyó a este reportaje