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El gobernador republicano de Oklahoma, Kevin Stitt, y su contrincante demócrata, Joy Hofmeister, llevan una enorme ventaja en la recaudación de fondos sobre sus oponentes en las elecciones primarias del martes, en un estado en el que temas candentes como el aborto, las armas de fuego y la pena de muerte serán probablemente el centro de atención de la contienda.
Stitt, de 49 años, el acaudalado ex jefe de una empresa hipotecaria con sede en Jenks, recaudó unos 5,4 millones de dólares, casi 20 veces más que sus tres oponentes republicanos combinados en las primarias, y es el gran favorito para avanzar. Sin embargo, el primer gobernador se vio obligado a gastar mucho en publicidad para contrarrestar los millones de dólares de los anuncios de ataque con dinero negro que lo pintan como blando con el crimen.
Sus oponentes en las primarias republicanas son el director del Departamento de Asuntos de Veteranos de Oklahoma, Joel Kintsel, de 46 años, la desconocida política Moira McCabe, de 40 años, y el ex policía de Tulsa Mark Sherwood, de 57 años, médico naturista.
Las urnas en todo el estado están abiertas el martes de 7 a.m. a 7 p.m.
Stitt adoptó posturas firmes en temas candentes importantes para los conservadores durante su primer mandato, firmando en mayo una de las prohibiciones del aborto más estrictas del país, ampliando el acceso a las armas de fuego y supervisando el regreso de la pena de muerte tras un paréntesis de casi siete años.
En la campaña, Stitt se centró en lo que llamó “el cambio de Oklahoma” y destacó el bajo desempleo del estado y la recuperación de la economía, incluyendo los más de 2.000 millones de dólares que se han depositado en las cuentas de ahorro del estado. Incluso después de cuatro años en el cargo, Stitt se pintó a sí mismo como un hombre de negocios y un outsider político en el molde del ex presidente Donald Trump.
“Yo era un completo outsider de la política”, dijo Stitt este año en la Conferencia de Acción Política Conservadora en Florida. “De hecho, mi primera donación política fue a Donald J. Trump para presidente”.
En el bando demócrata, Hofmeister, de 57 años, republicana desde hace mucho tiempo y directora del sistema de escuelas públicas de Oklahoma durante dos mandatos, anunció el año pasado que cambiaba de partido para presentarse como candidata a Stitt. Ambos se habían enfrentado por la gestión del estado de COVID-19 en las escuelas, incluida la prohibición de los mandatos de máscara, y el apoyo de Stitt a un plan de vales que desviaría los fondos de la educación pública a las escuelas privadas.
Hofmeister se enfrenta a la antigua leal al Partido Demócrata de Oklahoma y ex senadora estatal Connie Johnson, de 70 años, que fue una de las principales voces liberales durante sus 12 años como legisladora estatal.
Como republicana de toda la vida, Hofmeister no ofrece una alternativa tan clara a Stitt como la mayoría de los demócratas. Se describe a sí misma como “pro-vida”, aunque dice que la decisión sobre un aborto debe ser entre una mujer y su médico. Johnson, en cambio, fue una firme defensora del derecho al aborto durante su etapa en el Senado.
Hofmeister tuvo una gran ventaja en la recaudación de fondos sobre Johnson, ya que recaudó más de 1,1 millones de dólares en comparación con los 53.000 dólares de Johnson. De todos los candidatos a gobernador, incluyendo a Stitt, Hofmeister tenía la mayor cantidad de dinero en efectivo, unos 490.000 dólares, de cara a las primarias del martes, según los últimos informes financieros de la campaña.
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