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Tesla ha dejado de ser la empresa de coches eléctricos más popular del mundo después de que la china BYD encabezara la lista de ventas globales.
El fabricante de automóviles con sede en Shenzen, que está respaldado por el grupo de inversión Berkshire Hathaway de Warren Buffett, vendió 641.000 vehículos eléctricos e híbridos enchufables en el primer semestre de 2022.
En el mismo período, Tesla vendió 564.000 coches eléctricos después de luchar con la cadena de suministro y los problemas de producción en China relacionados con las restricciones de Covid.
Las ventas de BYD representaron un aumento del 300% con respecto a los primeros seis meses de 2021, coincidiendo con el propio ascenso de China como productor líder de vehículos eléctricos.
El país asiático exportó más de medio millón de vehículos eléctricos en 2021, el doble que en 2020. La cifra se compone cada vez más de marcas chinas o de marcas europeas de propiedad china como Volvo y MG Motor.
El ascenso de BYD ha hecho que el precio de sus acciones suba más del 24% desde principios de año, y más del 500% en los últimos cinco años.
Archivos de la empresa publicados esta semana también revelan que la producción de vehículos impulsados por combustibles fósiles cayó a cero en junio de 2022, frente a los más de 17.000 del mismo mes del año pasado.
La firma también superó a la surcoreana LG para convertirse en el segundo mayor productor mundial de baterías para vehículos eléctricos, solo por detrás de Contemporary Amperex Technology (CATL).
El jefe de Tesla, Elon Musk, desestimó anteriormente las ambiciones de BYD en materia de vehículos eléctricos, riéndose en una entrevista con Bloomberg en 2011. y dijo que no los veía como un competidor.
“¿Has visto su coche?”, dijo. “No creo que tengan un gran producto. No creo que sea particularmente atractivo, la tecnología no es muy fuerte… Creo que su objetivo es, y debería serlo con razón, asegurarse de que no mueren en China.”
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