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Donald Trump prometió “mantener a los hombres fuera de los deportes femeninos” durante un burdo discurso transfóbico en un mitin de campaña en Alaska el sábado por la noche.
“Es realmente degradante para las mujeres, y no debería permitirse”, dijo el Sr. Trump.
Trump criticó a la ex atleta de la Universidad de Pensilvania Lia Thomas sin nombrarla, afirmando que una “persona con cuerpo de hombre” había ganado injustamente una competición de natación femenina.
En marzo, la Sra. Thomas se convirtió en la primera atleta abiertamente transgénero en ganar el primer puesto en el campeonato de natación de la primera división de la National Collegiate Athletic Association (NCAA).
Su victoria provocó una reacción contra los deportistas transgénero y, en junio, el organismo rector de la natación mundial prohibió efectivamente que las mujeres transgénero compitieran en pruebas femeninas.
Decenas de estados de EE.UU. han introducido o están considerando la posibilidad de legislar para prohibir que los estudiantes-atletas transgénero jueguen en equipos deportivos que coincidan con su identidad de género.
El Sr. Trump insultó repetidamente a la Sra. Thomas durante el discurso, lo que provocó las risas del público.
También despotricó sobre un levantador de pesas transgénero que, según él, había batido récords en una competición femenina. No está claro a quién se refería.
El ex presidente ha contado variaciones de ambas historias en anteriores mítines de campaña.
El Sr. Trump asistió al mitin en Anchorage para apoyar a las candidatas Kelly Tshibaka y Sarah Palin en sus próximas carreras de mitad de período, al tiempo que atacó a la actual republicana Lisa Murkowski, que votó a favor de su destitución.
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