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Ucrania ha enviado decenas de autobuses a la devastada ciudad de Mariupol para evacuar a miles de residentes después de que Kiev y Rusia acordaran finalmente la apertura de un corredor humanitario.
“Hemos recibido un mensaje del Comité Internacional de la Cruz Roja en el que se confirma que la Federación Rusa está dispuesta a abrir el acceso del convoy humanitario a la ciudad de Mariupol con tránsito por la ciudad de Berdiansk”, dijo el viceprimer ministro ucraniano, Iryna Vereshchuk. “Vamos a enviar 45 autobuses al corredor de Mariupol”.
Y añadió: “Haremos todo lo posible para que los autobuses lleguen hoy a Mariupol y recojan a las personas que aún no han podido salir de la ciudad.”
El corredor se abrió a primera hora del jueves. Rusia pidió a Ucrania que garantizara el “respeto incondicional” del alto el fuego en la ciudad.
Mariupol lleva varias semanas bajo el constante bombardeo de las fuerzas rusas. La ciudad ha sido descrita como un “infierno” por aquellos que han conseguido salir. Hay informes de que los atrapados en la ciudad se las arreglan para sobrevivir sin apenas acceso a alimentos, agua o electricidad.
La Cruz Roja Internacional dijo que era “de vital importancia” que se permitiera el acceso de los autobuses.
“La vida de decenas de miles de personas en Mariupol depende de ello”, dijo la organización benéfica.
Hay informes de personas hambrientas que comen perros callejeros y afirmaciones de que los rusos han cometido un crimen de guerra en Mariupol, en relación con el bombardeo de un teatro donde se refugiaban miles de civiles. La ONU también afirma que hay cada vez más pruebas de la existencia de fosas comunes en la ciudad. Rusia ha dicho que no está atacando a los civiles.
El jueves aparecieron más imágenes de vídeo que revelan las devastadoras condiciones de Mariupol y que muestran el verdadero alcance de los daños. Las imágenes muestran casas carbonizadas con el horizonte de la ciudad cubierto de humo blanco.
El miércoles, Ucrania afirmó que las fuerzas rusas habían atacado un almacén de la Cruz Roja, en medio de un intenso bombardeo.
El presidente ruso Vladimir Putin ha dicho que sus tropas seguirán atacando la ciudad hasta que las fuerzas ucranianas en Mariupol se rindan.
Si bien el acuerdo sobre un corredor humanitario se considera una señal positiva, tales esfuerzos en el pasado han colapsado repetidamente con los combates que se producen durante el tiempo de alto el fuego acordado, lo que dificulta la evacuación de los ciudadanos.
La mayoría de los ciudadanos que han conseguido salir de la ciudad hasta ahora lo han hecho en vehículos privados, ya que los países no se pusieron de acuerdo para permitir el paso de autobuses.
La ciudad, en la que vivían más de 430.000 personas antes de la guerra, ha sufrido ataques contra el hospital de maternidad, las instalaciones del cuerpo de bomberos y las casas de los civiles.
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