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Un panel de la Cámara de Representantes de EE.UU. que está investigando los documentos de la Casa Blanca recuperados en Mar-a-Lago parece estar intensificando su investigación con una petición concreta de más detalles sobre los papeles y su contenido.
En un carta a la Administración Nacional de Archivos y Registros (NARA), la presidenta del Comité de Supervisión de la Cámara de Representantes, Carolyn B Maloney, escribió que, basándose en la información que su panel ya ha recibido sobre la eliminación de los registros de Donald Trump de la Casa Blanca, ella y sus colegas están buscando detalles más específicos sobre lo que había en las 15 cajas de documentos que el ex presidente no entregó a los Archivos Nacionales como lo exige la ley.
“La información en su respuesta”, escribe la Sra. Maloney, “sugiere que el ex presidente Trump y sus principales ayudantes pueden haber violado repetidamente la Ley de Registros Presidenciales y otras leyes federales, lo que podría impactar gravemente la preservación de los registros de la Administración Trump”.
“El Comité necesita documentos adicionales e información únicamente disponible de NARA para investigar el alcance total de esta conducta y determinar qué medidas adicionales, incluidas las posibles reformas legislativas, pueden ser necesarias para garantizar la preservación de los registros presidenciales para el pueblo estadounidense.”
La carta continúa enumerando numerosas solicitudes específicas, incluyendo crucialmente “la identificación de cualquier elemento que esté clasificado y el nivel de clasificación”, así como “todos los registros presidenciales transferidos a NARA que NARA supo que el ex presidente Trump había roto, destruido, mutilado o intentado romper, destruir o mutilar.”
Cuando las cajas fueron recuperadas por primera vez en Mar-a-Lago a principios de este año, se afirmó inicialmente que en su mayoría contenían artículos sin importancia, pero rápidamente se supo que entre su contenido había cartas entre el señor Trump y líderes mundiales, incluido Kim Jong-un.
A medida que el escándalo crecía, el Sr. Trump y muchos en la derecha se apoderaron de una presentación judicial del abogado especial John Durham que, según ellos, revelaba que Hillary Clinton le había espiado ilegalmente como parte de una falsa investigación sobre sus supuestas conexiones con Rusia.
Sin embargo, la historia era inexacta y no resistió el escrutinio, y las afirmaciones sobre el supuesto hackeo de la Casa Blanca de Trump se desvanecieron del ciclo de noticias.
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