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Un hombre murió tras ser rescatado en estado de inconsciencia de un río desbordado en el oeste de Sidney, después de que las lluvias torrenciales provocaran una crecida de las aguas “que ponía en peligro la vida” en muchas zonas del estado de Nueva Gales del Sur (NSW).
Una caótica campaña de evacuación ha continuado en medio de las enormes inundaciones que han obligado a miles de personas a abandonar sus hogares.
El hombre, cuya identidad no ha sido revelada, fue rescatado del río embravecido el domingo por la tarde por los servicios de emergencia, pero no pudo sobrevivir.
“Vimos un helicóptero con un equipo de policías saltando al agua, tratando de salvar a alguien”, dijo el testigo Luke Touma a 7NEWS.
Anteriormente, se informó de la muerte de otro hombre tras caer de un kayak en el río Parramatta, cerca de Canada Bay, el domingo, mientras los funcionarios de emergencia luchaban por reanimarlo. Los funcionarios, sin embargo, no han relacionado esta muerte con el clima todavía.
Sydney tiene actualmente 18 órdenes de evacuación con más de 30.000 personas a las que se les ha pedido que abandonen sus casas, ya que NSW es testigo de otra devastadora inundación este año, después de haberlas visto en marzo y en abril también, en las que la ciudad recibió la lluvia de un mes en una sola noche.
Algunas zonas están totalmente cortadas, ya que las carreteras siguen inundadas. Se ha pedido a los ciudadanos que eviten cualquier desplazamiento no esencial, incluido el uso del transporte público.
Las inundaciones se produjeron después de que las fuertes lluvias y los rápidos vertidos de las presas hicieran que los ríos crecieran a un ritmo alarmante y batieran los récords de inundación.
Las autoridades advierten de que la situación esta vez podría ser mucho peor y piden a la gente que no espere las órdenes de evacuación si tiene la opción de salir con seguridad.
“Si usted estaba a salvo en 2021 no asuma que estará a salvo esta noche. Esta es una situación que evoluciona rápidamente y podríamos ver áreas impactadas que no hemos visto antes”, dijo Steph Cooke, ministro de servicios de emergencia del estado.
La Sra. Cooke dijo que la presa de Warragamba estaba derramando a un ritmo de más de 500 gigalitros al día – un volumen mayor que durante las inundaciones de marzo y abril de este año, que inundaron grandes franjas del estado.
Los expertos dijeron que las frecuentes inundaciones en Nueva Gales del Sur y su creciente intensidad se han visto agravadas por la crisis climática y el fenómeno meteorológico de La Niña.
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