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Casi tres años después de que desapareciera repentinamente de su casa en California, el adolescente Connerjack Oswalt ha sido encontrado durmiendo en una tienda de conveniencia en Utah.
El joven de 19 años, al que se le ha diagnosticado autismo y otros problemas de salud mental, estaba temblando debido al frío cuando fue encontrado en el condado de Summit, famoso por sus destinos de esquí, el 9 de abril, según informaron las autoridades del condado.
“Connerjack, que es autista, fue reportado como desaparecido en California en septiembre de 2019. Los diputados pudieron reunir a Connerjack con su familia, que estaba perdiendo la esperanza. Por favor, vean esta historia conmovedora y emotiva”, escribió el sheriff en un post en Facebook.
El padrastro del adolescente viajó al condado para confirmar que se trataba de Connerjack y hacer saber a su madre que estaba vivo. El emotivo momento fue captado por la cámara corporal de uno de los agentes presentes en la sala en ese momento, según un informe.
“¿Es él?”, se oye la voz de la madre preguntando a través del altavoz del teléfono.
“Un poco mayor, pero sí”, dijo el padrastro.
“Mi cariño está vivo”, respondió la madre, con la voz quebrada por las lágrimas: “Oh, Dios mío”.
El Sr. Oswalt estuvo viviendo en las calles de la zona durante un par de semanas, dijeron las autoridades.
“Durante el último par de semanas, muchos en nuestra comunidad nos llamaron sobre una persona sin hogar que deambulaba por la zona de Kimball Junction, empujando un carrito de la compra”, decía el post de Facebook.
Añadía que los ayudantes del sheriff respondieron a las alertas en todas las ocasiones e incluso “ofrecieron servicios al joven, que NO estaba violando ninguna ley”. Sin embargo, el adolescente rechazó la ayuda.
El sábado, decidieron volver a ofrecer ayuda al adolescente y éste aceptó.
“Lo subieron a su cálido vehículo patrulla y comenzaron a indagar para averiguar quién era el hombre. A través de las interacciones anteriores y de la interacción del sábado, estaba claro para los diputados que el hombre se comunicaba de manera diferente”, dijeron los funcionarios, y añadieron que comenzaron a investigar sobre el adolescente poco después.
Esta iniciativa ha puesto fin a los más de dos años de lucha de la familia por encontrar a su hijo.
Su padrastro Gerald Flint dijo: “Cualquier indicio de algo que se pareciera remotamente a él, lo seguiríamos. Ha sido una verdadera pesadilla”.
Repartieron volantes, escanearon las redes sociales y rastrearon pistas inútiles desde 2019 e incluso se mudaron a la ciudad natal del adolescente, Idaho Falls, en un intento de estar disponibles allí en caso de que finalmente logre regresar.
El día que desapareció, su madre recuerda haber hecho quesadillas, pero esa tarde ya no estaba a la hora de comer.
“Nunca dejé de buscarlo. No había un día que no lo buscara, de alguna forma o manera”, dijo su madre Suzanne Flint.
La policía dijo que está investigando las circunstancias exactas de su desaparición y su paradero en los últimos años.
Con la ayuda de una orden judicial pendiente y la huella dactilar del Sr. Oswalt, los agentes pudieron encontrar alguna pista.
El sheriff Justin Martínez dijo: “Los ayudantes sintieron que había algo allí, algo más allá de una orden criminal. Había un esfuerzo humanitario que debía ser explorado más a fondo”.
Rebuscando entre montones de informes sobre niños desaparecidos y en peligro, los agentes encontraron su informe de desaparición de 2019 de la localidad californiana de Clearlake. Después de que las fotos coincidieran, los funcionarios llamaron a la familia.
Al recibir la llamada, los Flint pensaron que su hijo había sido encontrado muerto.
Pero después de que se confirmara la identidad del Sr. Oswalt, el Sr. Flint dejó el trabajo y corrió a Utah.
“Todo el mundo en la sala estaba llorando. Se esforzaron al máximo, pusieron horas de trabajo”, dijo el Sr. Flint. “Podrían haberlo descartado, pero no lo hicieron y eso marcó toda la diferencia del mundo”.
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