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Cientos de tractores conducidos por furiosos agricultores que protestaban contra un plan para reducir los niveles de nitratos convergieron en Bruselas el viernes, creando importantes trastornos de tráfico en la capital de Bélgica.
El sindicato de agricultores BB y varios otros combinaron sus esfuerzos para reunir a más de 2.700 vehículos agrícolas, según la policía de Bruselas.
Se cerraron varias carreteras importantes de Bruselas y la policía advirtió de que las perturbaciones podrían durar hasta el final del día, recomendando a la gente que utilizara el transporte público en lugar de los coches personales.
El gobierno regional flamenco se esfuerza por llegar a un acuerdo para reducir la contaminación por nitratos ante las objeciones de los agricultores, que consideran que dejaría a muchos sin trabajo.
Los agricultores también alegan que su sector tiene que hacer recortes mucho más profundos que la industria y quieren un reparto más equitativo. Las negociaciones se han prolongado durante semanas y han debilitado hasta el punto de ruptura al gobierno regional del norte de Bélgica.
El debate sobre la contaminación agrícola se está convirtiendo cada vez más en una cuestión política en muchos de los países agrícolas de la UE. Dentro de dos semanas será uno de los temas centrales de las elecciones holandesas y también afecta a Bélgica, otro país de la UE donde la agricultura intensiva ha enfrentado a los ecologistas con los grupos de presión agrícolas.
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