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Una pareja ha demandado a una clínica de fertilidad de California alegando que trasplantó un embrión con una mutación cancerígena durante un proceso de fecundación in vitro a pesar de que la pareja les había advertido de que no lo hicieran.
Jason y Melissa Díaz afirman en la presentación legal de Los Ángeles que la clínica HRC Fertility ha demostrado un “trágico patrón” de uso de óvulos, esperma y embriones “de forma contraria a las instrucciones de sus pacientes” y que la clínica ocultó información a los clientes.
La pareja afirma que, al año de nacer su hijo, descubrieron que tenía la mutación CDH1 del cáncer gástrico difuso hereditario, según ABC News.
Se trata de una enfermedad genética que aumenta el riesgo de padecer un tipo de cáncer de estómago, el Institutos Nacionales de Salud afirma.
El señor Díaz tenía 32 años cuando le diagnosticaron cáncer gástrico difuso en 2018. Se sometió a quimioterapia y cirugía de extirpación de estómago. Las pruebas genéticas revelaron que tenía la mutación CDH1, afirma la demanda.
Durante una conferencia de prensa el miércoles, el Sr. Díaz dijo que él y su esposa decidieron usar la FIV -fecundación in vitro- para tener hijos y poder evitar que el niño tuviera la mutación.
“No me gustaría que nadie en la tierra experimentara este tipo de dolor y ahora me veré obligado a ver a mi propio hijo, mi propia carne y sangre, pasar por esto después de que Melissa y yo trabajáramos tan duro para protegerlo”, dijo el Sr. Díaz a la prensa, según ABC. “Cada día me duele el corazón por mi pequeño, sabiendo el dolor y los retos que tiene por delante”.
La pareja afirma en su demanda que dijeron a la clínica y al médico nombrado en la presentación legal, el doctor Bradford Kolb, endocrinólogo reproductivo, que habían elegido la FIV para evitar que se transmitiera la mutación.
En la demanda afirman que también analizaron sus embriones para detectar la mutación BRCA-1 del cáncer de mama, de la que es portadora la Sra. Díaz.
“El Dr. Kolb sabía desde el momento de su primera visita con ellos, el 12 de diciembre de 2018, que tenían la intención de evitar transmitir esta rara mutación para el cáncer de estómago”, dice la presentación legal. “El asesor genético de Jason y Melissa envió informes relacionados con las pruebas de las mutaciones específicas directamente al Dr. Kolb en 2019”.
El Dr. Kolb transfirió un embrión sin ninguna de las dos mutaciones en agosto de 2020 que terminó en un aborto involuntario. Una segunda transferencia tuvo lugar en enero de 2021, que dio lugar al nacimiento de su hijo. En la presentación judicial se alega que a la pareja se le dijo que el embrión no tenía el gen CDH1, pero los registros revelaron posteriormente que sí lo tenía.
“HRC nos dijo que teníamos un embrión masculino que tenía mi mutación BRCA-1 y no la mutación del cáncer de estómago”, declaró Díaz a la prensa el miércoles. “Ese embrión iba a ser nuestro plan B porque la mutación BRACA causa cáncer de mama y ovario, por lo que la probabilidad de que afectara negativamente a un niño era significativamente menor que a una niña”.
“Así que en enero de 2021, informamos a HRC que queríamos proceder con el embrión masculino que HRC nos dijo que solo tenía la mutación BRCA-1”, agregó.
La pareja descubrió que el embrión tenía el gen en julio de 2022, afirma la demanda. En ese momento se estaban preparando para otra transferencia de embriones con la esperanza de tener un segundo hijo.
“Para su horror, Melissa también reconoció el primer embrión – claramente designado como portador del alelo mutante para el cáncer gástrico difuso hereditario – como el embrión transferido el 8 de enero de 2021”, dice la presentación legal. “El embrión nº 1 se había convertido en su querido hijo pequeño”.
La demanda añade que la clínica supuestamente “falsificó los registros” que cubrían la información escrita a mano que revelaba qué embrión se había utilizado.
“Los registros falsificados de HRC Fertility de octubre de 2022 son prueba del conocimiento y la intención de HRC Fertility de ocultar su mala conducta”, dice la presentación legal, y añade que los registros, incluida la información manuscrita, se entregaron en diciembre del año pasado.
La demanda se centra en “la ocultación fraudulenta por parte de HRC de información material a sus clientes – más concretamente, el hecho de que HRC Fertility tiene un largo historial de uso indebido del material biológico de sus clientes, en contradicción directa con las instrucciones de sus clientes”.
“Además, ocultó que sus procesos y procedimientos son insuficientes para evitar errores tan graves”, señala el documento. “Si hubiera hecho tales revelaciones, Jason y Melissa nunca habrían confiado a HRC Fertility y al doctor Kolbcon su material genético”.
La pareja pide una indemnización por daños y perjuicios y medidas cautelares, y están tratando de conseguir un juicio con jurado.
HRC Fertility dijo a ABC que “respalda la profesionalidad y experiencia de nuestro personal médico”.
“Nos tomamos muy en serio todas las decisiones y preocupaciones de nuestros pacientes y estamos comprometidos a proporcionar la más alta calidad de atención”, dijeron en un comunicado. “Empatizamos profundamente con la situación de esta familia. Sin embargo, los pacientes asociados con el caso buscaron pruebas genéticas y asesoramiento genético fuera de HRC Fertility, y con una parte externa; deseaban que se transfiriera un embrión masculino, lo que llevamos a cabo de acuerdo con los deseos explícitos de la familia y de acuerdo con el más alto nivel de atención.”
“Hemos ayudado con éxito a miles de personas, parejas y familias a convertirse en padres amorosos, incluidos los pacientes implicados en esta historia”, añadieron.
Díaz declaró a la prensa el miércoles que “estoy muy asustada y nerviosa por volver a intentar tener un segundo hijo, pero esta vez haré mis preguntas. Lo comprobaré dos veces”.
“Es desgarrador que haya tenido que llegar a esto, pero simplemente sé consciente de lo que está pasando con tu propio cuerpo, de lo que están intentando hacer con tu cuerpo”, añadió.
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