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El candidato a dirigir la Administración Nacional de Archivos y Registros se enfrentará a un escrutinio inusual durante un proceso de confirmación que se ha complicado por el papel de la agencia en una investigación en curso sobre un ex presidente.
La elegida por el presidente Joe Biden para ser la próxima archivera de Estados Unidos, Colleen Shogan, comparecerá el miércoles ante el Comité de Seguridad Nacional y Asuntos Gubernamentales del Senado.
El camino de la historiadora y politóloga de 46 años hacia la confirmación podría volverse rocoso mientras los republicanos siguen exigiendo más información sobre el registro del FBI el mes pasado en el complejo turístico Mar-a-Lago de Donald Trump.
La agencia de registro de la nación puso en marcha la investigación a principios de este año con una remisión al FBI después de que Trump devolviera 15 cajas de documentos que contenían docenas de registros con marcas clasificadas.
El senador Rick Scott, republicano de Florida, miembro del comité que examina la nominación de Shogan, “absolutamente exigirá respuestas” sobre la búsqueda del FBI como parte de su audiencia, dijo un portavoz de Scott a Bloomberg News el mes pasado. Otros miembros del comité, como el senador republicano Josh Hawley, han reprendido al fiscal general Merrick Garland por la investigación y han cuestionado los motivos de la administración.
Se trata de un escenario polémico para el nombramiento de un archivero, un puesto que suele ser ocupado por académicos e historiadores y que suele pasar por el Senado con poco escrutinio o cobertura. Shogan, natural de Pittsburgh, es licenciado en ciencias políticas por el Boston College y doctor en política estadounidense por la Universidad de Yale.
“Tengo entendido que nunca ha sido un asunto político y que no es un trabajo partidista”, dijo el senador Rob Portman, de Ohio, uno de los republicanos que interrogará a Shogan. El senador Gary Peters, presidente demócrata de la comisión, dijo que apoya la nominación de Shogan, pero que le preocupa cómo podrían responder sus colegas republicanos.
“Esperemos que la gente la reciba calurosamente, pero nunca se sabe hasta el día mismo de la audiencia”, dijo Peters.
Shogan será presentada en su audiencia el miércoles por la mañana por una amiga, la senadora Shelley Moore Capito, republicana de Virginia. La senadora dijo que siente un gran respeto por Shogan, pero advirtió que no sabe cómo se desarrollará su nominación.
La candidata no es ajena a los pasillos de mármol del Congreso. Shogan comenzó su carrera como asistente del senador Joe Lieberman, demócrata de Connecticut, y luego ascendió a un puesto en el Servicio de Investigación del Congreso, una operación académica que produce análisis no partidistas para los legisladores y su personal. Shogan también trabajó durante una década en la Biblioteca del Congreso.
Actualmente es ejecutiva en la Asociación Histórica de la Casa Blanca, donde ha trabajado bajo las administraciones de Trump y Biden.
Como archivista, Shogan tomaría el timón de una agencia que hace todo lo posible por preservar los registros de la nación, incluyendo documentos atesorados como la Constitución y la Declaración de Independencia. Su extensa colección abarca 13.000 millones de páginas de texto y 10 millones de mapas, gráficos y dibujos, así como decenas de millones de fotografías, películas y otros registros.
La Casa Blanca dijo en un comunicado el martes que los funcionarios están esperando su audiencia.
“Está bien calificada para ser la próxima Archivista de los Estados Unidos y esperamos que el Senado la confirme rápidamente para que pueda comenzar el importante trabajo que tiene por delante”, dijo un portavoz.
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