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El director de la Escuela Primaria Robb en Uvalde, Texas, fue suspendido el lunes, casi exactamente dos meses después de que 19 estudiantes y dos profesores murieran en el segundo tiroteo escolar más mortífero de la historia de Estados Unidos.
Añadió que la Sra. Gutiérrez “responderá a las preguntas planteadas por el Superintendente Harrell antes del final de esta semana”.
Su suspensión se produce una semana después de que el comité de la Cámara de Representantes de Texas que investigó la masacre del 24 de mayo diera a conocer su informe demoledor en el que se señalaban fallos a todos los niveles y por parte de todas las autoridades ese día.
La investigación, que se basó en entrevistas con docenas de testigos, incluido el director, reveló que la Sra. Gutiérrez sabía que la puerta de una de las aulas donde se produjo el tiroteo no se cerraba correctamente, pero no la hizo reparar.
Las imágenes de vigilancia muestran que Salvador Ramos, de 18 años, pudo abrir la puerta del aula y entrar sin llave.
“La escuela primaria Robb tenía problemas recurrentes con el mantenimiento de sus puertas y cerraduras. En particular, se sabía que el mecanismo de cierre del aula 111 era defectuoso, pero no se reparó”, dice el informe.
“La directora de la escuela primaria Robb, su ayudante responsable de introducir las órdenes de trabajo de mantenimiento, la profesora del aula 111, otros profesores del edificio de cuarto grado e incluso muchos alumnos de cuarto grado conocían ampliamente el problema de la cerradura del aula 111.
“Sin embargo, nadie dio una orden de trabajo para reparar la cerradura, ni la directora, ni su secretaria, ni el profesor del aula 111, ni nadie más”.
La Sra. Gutiérrez admitió en su testimonio ante el comité que la administración de la escuela sabía de los problemas con el cierre de la puerta, revelando que había sido reportado alrededor de las vacaciones de primavera de 2022.
Luego, el día del tiroteo, el director no comunicó una alerta de cierre por el sistema de intercomunicación de la escuela cuando Ramos entró en el edificio y comenzó a disparar.
La Sra. Guttierez fue nombrada recientemente como directora de la Escuela Primaria Robb al comienzo del año escolar 2021/2022.
Sin embargo, ha trabajado en la escuela durante más de dos décadas. La Sra. Guttierez comenzó como maestra de cuarto grado en 2008 antes de convertirse en subdirectora en 2018.
Ella es ahora el segundo empleado de UCISD colocado en licencia a raíz de la masacre.
El primero fue el Jefe de la Policía Escolar Pete Arredondo, quien ha cargado con gran parte de la culpa por la respuesta chapucera al tiroteo masivo. Como comandante en el lugar, el jefe de la policía no envió a los agentes de la ley al aula para enfrentarse al pistolero.
En su lugar, pasaron unos asombrosos 77 minutos desde el momento en que el pistolero entró en la Escuela Primaria Robb y empezó a matar a víctimas inocentes hasta el momento en que una unidad de élite de la Policía de Fronteras entró finalmente en el aula y mató al autor a tiros.
El informe del comité de la Cámara de Representantes de Texas afirmó que era “plausible” que el largo retraso costara la vida de algunas de las víctimas que se desangraban dentro del aula.
Una maestra murió de sus heridas en una ambulancia, mientras que tres niños murieron después de llegar al hospital.
El jefe Arredondo fue inicialmente puesto en licencia administrativa el 22 de junio, a medida que aumentaban las críticas sobre su gestión de la masacre y se iniciaban múltiples investigaciones.
Se esperaba que el consejo escolar se reuniera en una sesión especial el sábado en la que se votaría su despido, pero la reunión se canceló en el último momento.
Ahora se celebrará en una fecha posterior -aún no confirmada-.
La suspensión de la Sra. Guttierez se produjo el mismo día en que la junta de UCISD celebró una reunión el lunes por la noche en la que las familias de las víctimas y los residentes locales exigieron a los miembros de la junta que asumieran la responsabilidad de sus propios fallos que permitieron el desarrollo de la masacre.
El miembro de la junta Luis Fernández finalmente admitió a la multitud frustrada que “todo el mundo metió la pata”.
En la reunión, la junta también acordó posponer el inicio del próximo año escolar hasta el 6 de septiembre para que los funcionarios puedan resolver los problemas de seguridad, incluyendo el reemplazo de las aulas en Robb Elementary.
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