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El gobierno debe “controlar” los “grandes riesgos para la seguridad nacional” que suponen los impactos del empeoramiento de la crisis climática en muchas áreas de la infraestructura nacional crítica, ha dicho un comité multipartidista de diputados y pares.
El comité conjunto sobre la estrategia de seguridad nacional ha advertido de que la falta de preparación del Reino Unido para futuros eventos influenciados por el clima significa que infraestructuras esenciales como la energía, el agua, el transporte y las comunicaciones son vulnerables.
El comité, presidido por la diputada laborista Dame Margaret Beckett, dijo que había pruebas abrumadoras de que la emergencia ambiental ya está teniendo un impacto en la infraestructura del Reino Unido.
También está claro, según la comisión, que ningún ministro ha asumido la responsabilidad de adaptar las infraestructuras del Reino Unido para hacer frente a los impactos de la crisis climática.
Su informe sugiere que esto “revela una extrema debilidad en el centro del gobierno”.
El documento cita ejemplos recientes de los efectos de las inclemencias meteorológicas en lo que describieron como “un informe condenatorio”.
Estos efectos incluyen:
- La muerte de tres personas por el descarrilamiento de un tren en Escocia, tras las fuertes lluvias de agosto de 2020
- Casi un millón de personas se quedaron sin electricidad, algunas durante largos periodos de tiempo, después de que los fuertes vientos derribaran las líneas eléctricas en el noreste de Inglaterra y Escocia durante la tormenta Arwen en noviembre de 2021
- El fallo de los sistemas de drenaje de las vías férreas que estuvo a punto de provocar la inundación del Banco Nacional de Sangre de Bristol.
El comité también señaló que una de sus sesiones de pruebas se realizó durante la ola de calor de julio de 2022, cuando las temperaturas alcanzaron un máximo de 40,3C.
Dame Margaret dijo: “Hay muchos ejemplos del gravísimo impacto que el cambio climático ha tenido ya en nuestras infraestructuras nacionales críticas. Y seguramente habrá más en el futuro, seguramente más graves aún”.
“Pero lo que más me preocupa es la falta de pruebas de que alguien en el gobierno se centre en cómo todos los impactos pueden confluir, creando crisis en cascada. Sencillamente, no hay ministros con la responsabilidad centrada en garantizar que nuestras infraestructuras sean resistentes a los fenómenos meteorológicos extremos y a otros efectos del cambio climático.”
La comisión criticó al autodenominado “ministro para la resiliencia de las infraestructuras” de la administración de Boris Johnson -el entonces ministro de la oficina del gabinete Michael Ellis- por una “grave dejación de funciones” por negarse a testificar ante ellos.
La comisión ha estado recopilando pruebas para su investigación durante el último año, y ha advertido de que pronto habrá un clima aún más severo -y los consiguientes impactos-.
Se destacó cómo las altas temperaturas pueden provocar el hundimiento de los cables eléctricos y el reblandecimiento y bacheado de las carreteras. Se espera que las inundaciones sean más graves, y que el fallo de los diques ferroviarios sea más frecuente.
La dependencia de otros sectores de la infraestructura de la electricidad -en parte como consecuencia de la transición a la red cero- “crea más vulnerabilidades”, dijo el comité.
Dame Margaret dijo: “La tormenta Arwen demostró la rapidez con la que los efectos de un apagón pueden repercutir en otros sectores. La gente se quedó sin acceso a sus teléfonos fijos después de las tormentas, y ni siquiera pudo llamar a los servicios de emergencia en zonas con poca señal de móvil. Estas crisis en cascada suponen un gran peligro para el funcionamiento de la economía del Reino Unido, y para la sociedad, por lo que se trata de un grave riesgo para la seguridad nacional.
“Acontecimientos como la tormenta Arwen y la ola de calor del verano van a ocurrir cada vez con más frecuencia. La semana pasada supimos que el Reino Unido podría sufrir apagones a principios del año que viene si perdemos más suministros de gas de Europa. El nuevo primer ministro debe unir todos los hilos del gobierno para mitigar las posibles catástrofes, incluidos los impactos del cambio climático.”
Y añadió: “Este gobierno debe reconocer por fin que es mejor prevenir que curar y dejar de lado su enfoque peligrosamente reactivo de la gestión de riesgos.”
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