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El tribunal de los Jemeres Rojos de Camboya ha rechazado la apelación a la condena por genocidio del último líder superviviente del grupo comunista, Khieu Samphan.
Las Cámaras Extraordinarias de los Tribunales de Camboya, un tribunal respaldado por la ONU encargado de perseguir los crímenes del régimen de los Jemeres Rojos, gastó 337 millones de dólares y 16 años para condenar al antiguo líder y a otros dos acusados en relación con el reinado que causó la muerte de unos 1,7 millones de personas.
Khieu Samphan, de 91 años, que fue jefe de Estado en el gobierno de los Jemeres Rojos de Camboya entre 1975 y 1979, fue declarado culpable en 2018 de genocidio, crímenes contra la humanidad y crímenes de guerra y condenado a cadena perpetua.
“Está claro que, a través de mí, la cámara se dirigía, más bien, al Partido Comunista de Kampuchea”, dijo a los jueces del tribunal en una declaración final el pasado mes de agosto mientras recurría la condena.
Khieu ha negado haber tenido una influencia real en las políticas cuando los Jemeres Rojos pretendían establecer una sociedad agraria utópica, causando la muerte de los ciudadanos por ejecución, hambre y atención médica inadecuada.
“No importa lo que decidan, moriré en prisión”, dijo al tribunal el año pasado.
“Moriré recordando siempre el sufrimiento de mi pueblo camboyano. Moriré viendo que estoy solo frente a ustedes. Se me juzga simbólicamente y no por mis actos reales como individuo”.
En respuesta al veredicto, el director regional adjunto de Campañas de Amnistía Internacional, Ming Yu Hah, declaró “A pesar de todos sus defectos bien documentados, el tribunal de los Jemeres Rojos ha demostrado que los responsables de crímenes en virtud del derecho internacional pueden responder y lo harán. La sentencia de hoy debe servir como otro recordatorio de que la rendición de cuentas por los crímenes más graves no tiene fecha de caducidad.”
El coacusado del ex líder Nuon Chea, segundo jefe de los Jemeres Rojos y principal ideólogo, fue condenado dos veces y recibió la misma cadena perpetua.
En 2019, Nuon Chea murió a la edad de 93 años.
El último fallo del tribunal se produce cuando Khieu ya está cumpliendo otra sentencia de cadena perpetua por una condena de 2014 por crímenes contra la humanidad relacionados con traslados forzados y desapariciones de masas.
El tribunal también había condenado a Kaing Guek Eav, también conocido como Duch, en 2010 por crímenes contra la humanidad, asesinato y tortura.
En 2020, murió a la edad de 77 años mientras cumplía una sentencia de cadena perpetua.
Había servido como comandante de la prisión de Tuol Sleng, donde se torturó a unas 16.000 personas antes de ser llevadas para ser asesinadas.
El verdadero jefe de los Jemeres Rojos, Pol Pot, murió en la selva en 1998 a la edad de 72 años, mientras los restos de su movimiento libraban sus últimas batallas en una guerra de guerrillas iniciada tras perder el poder.
Información adicional de las agencias
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