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Francia está celebrando su feriado nacional el viernes con aviones de combate zumbando y un gran desfile del Día de la Bastilla en París, y con más de 100,000 policías desplegados en todo el país para evitar un nuevo estallido de disturbios en los barrios desfavorecidos.
Este año, los eventos anuales que celebran el inicio de la Revolución Francesa el 14 de julio de 1789 se producen después de los disturbios más serios del país en casi 20 años, luego del tiroteo fatal de la policía contra un adolescente con raíces norteafricanas que puso al descubierto la ira por arraigada desigualdad y discriminación racial.
India es el invitado de honor en el desfile del Día de la Bastilla de este año, con el primer ministro Narendra Modi listo para mirar en la tribuna VIP junto al presidente francés Emmanuel Macron. Unos 240 soldados indios encabezarán la marcha por los Campos Elíseos ante miles de fuerzas francesas, y aviones de combate indios de fabricación francesa se unirán al tradicional sobrevuelo que cierra el evento.
Francia a menudo presenta socios internacionales en el Día de la Bastilla, y la elección de India se produce cuando Francia busca fortalecer aún más la cooperación en la lucha contra el cambio climático, las ventas militares y la región estratégica del Indo-Pacífico. Pero los derechos humanos faltaban en la amplia agenda, a pesar de las preocupaciones planteadas por legisladores europeos, grupos de derechos humanos y otros.
Las celebraciones se llevan a cabo en pueblos y ciudades de Francia el Día de la Bastilla, destinadas a celebrar los ideales franceses de “libertad, igualdad y fraternidad”.
Pero el lema suena hueco para muchas personas que viven en proyectos de vivienda abandonados que tienen sus raíces en las antiguas colonias francesas y luchan contra la falta de oportunidades y el racismo cotidiano. Estos problemas salieron a la luz después del asesinato policial de Nahel Merzouk, de 17 años, el mes pasado en el suburbio parisino de Nanterre durante una parada de tráfico.
El tiroteo mortal a quemarropa, captado en vídeo, provocó varios días de enfrentamientos con la policía, incendios de edificios y vehículos y saqueos de comercios en ciudades y pueblos de toda Francia.
Preparándose para más violencia alrededor del Día de la Bastilla, cuando los disturbios tienden a aumentar cada año, Francia desplegó 130.000 policías el jueves y viernes. Los fuegos artificiales fueron prohibidos en varias ciudades, incluida Nanterre, después de que se usaron para atacar a la policía en los disturbios recientes.
Durante la noche de jueves a viernes, el Ministerio del Interior reportó 97 personas detenidas en violencia urbana y 218 autos incendiados en todo el país. Eso fue un poco más bajo que el año pasado.
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