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La factura de la luz se triplicará y los hogares británicos se enfrentarán a un “golpe tremendo” en su nivel de vida, según advierten los economistas.
El hogar medio podría enfrentarse a un coste de 500 libras por la energía en enero de 2023, con una predicción de un precio máximo anual de 3.850 libras, superando con creces las ya sombrías predicciones sobre el aumento de las facturas realizadas a principios de este año.
La previsión, realizada por la consultora de servicios públicos BFY Group, se produjo mientras Rusia tomaba nuevas medidas para recortar sus suministros de gas a Europa, estrangulando aún más el mercado.
El país ha reducido drásticamente el suministro de gas a varios estados europeos desde que inició la guerra contra Ucrania. El amargo conflicto ha aumentado la presión sobre los costes mundiales de los alimentos, la gasolina y la energía doméstica.
Las proyecciones han aumentado la preocupación de los economistas sobre la profundidad y duración de la crisis del coste de la vida.
En los próximos dos años, la inflación afectará a los niveles de vida a un ritmo que no se ha visto desde al menos la década de 1950, dijo Paul Dales, economista jefe del Reino Unido en Capital Economics.
“Se avecina un golpe tremendo para el poder adquisitivo de los hogares”, dijo.
La renta disponible, una medida que calcula la cantidad de dinero que les queda a los hogares después de pagar lo esencial, caerá un 3% este año y un 2% el próximo, según Dales.
“Esto no ha caído más de un 2% en un año natural desde 1955”, dijo.
Estos resultados se producen mientras la organización benéfica Citizens Advice afirma que se enfrenta a niveles récord de solicitudes de ayuda de personas que no pueden recargar sus contadores de prepago.
“Nuestros datos reflejan las duras opciones a las que se enfrentan las familias de todo el mundo a medida que la crisis del coste de la vida se agudiza”, dijo Dame Clare Moriarty, directora ejecutiva de Citizens Advice.
“Lo más preocupante es que los problemas que solemos ver en invierno -como la gente que no puede recargar su contador de prepago- están alcanzando su punto máximo en pleno verano”.
Las previsiones de BFY son “una pésima noticia para todos”, dijo Berwick, pero los más expuestos serán los que tengan contadores de prepago. Este grupo, que suele tener ingresos más bajos, tendrá que encontrar el dinero de inmediato, en lugar de suavizar el impacto de las facturas de invierno a través de los débitos directos de un año.
“Los clientes de prepago buscarán recargar sus contadores con 500 libras en enero”, dijo.
El regulador de la energía, Ofgem, tendrá que tener en cuenta esta reciente subida de precios cuando fije una nueva cifra en agosto. Su llamada ventana de observación para supervisar los mercados de la energía se inició en febrero y terminará el 18 de agosto, antes de que se anuncie el nuevo tope unos días después.
“Esto significa que la mayoría de los datos ya se han recogido”, dijo Berwick.
Cornwall Insight, otra consultora, pronosticó un tope de precios de 3,364 libras para enero de 2023, a principios de este mes, pero el enfoque cada vez más militante de Rusia con respecto a las exportaciones de gas ha empeorado las perspectivas, según los expertos del mercado.
BFY cree ahora que Ofgem tendrá que fijar el anterior cambio de límite de precios de octubre en 3.420 libras, y se espera otro aumento cuando se revise el límite en enero, hasta 3.850 libras.
Los resultados aumentarán la presión para que el gobierno intervenga más en los próximos meses.
Expertos en políticas de organizaciones benéficas, como Citizens Advice, han pedido al gobierno que aumente las prestaciones en octubre basándose en la instantánea de septiembre del crecimiento de los precios, en lugar de dejar a los más vulnerables enfrentándose a un retraso de seis meses al tomar los datos de abril de este año.
“Está claro que nuestros gráficos sólo van en la dirección equivocada”, dijo Dame Clare.
“El Gobierno hizo lo correcto al aportar apoyo a través del sistema de prestaciones para ayudar a las personas que más lo están pasando mal. Ahora debe estar preparado para actuar de nuevo antes de que llegue el invierno”, añadió.
Los economistas están especialmente preocupados por el impacto en aquellos hogares con poca o ninguna holgura en su gasto mensual.
“Lo más preocupante para mí es que las personas que más van a sufrir se encuentran ya en el extremo inferior del espectro de ingresos”, dijo Dales.
Esto significa que los consumidores más bajos probablemente recortarán todo lo que puedan para salir adelante, como las pólizas de seguro o las contribuciones a las pensiones, con graves consecuencias a largo plazo para la economía en general, dijo.
“Se recorta el futuro y se paga el ahora”, añadió.
La crisis del coste de la vida va a desempeñar un papel fundamental.en la actual contienda por el liderazgo conservador. Los dos contendientes, Liz Truss y Rishi Sunak, se han enfrentado sobre cómo apoyar mejor a los hogares.
El Sr. Sunak dio un giro de 180 grados el martes al prometer un recorte temporal del IVA en las facturas de combustible doméstico, tras haber criticado previamente los planes de reducción de impuestos de la Sra. Truss.
Pero si el recorte del IVA se convirtiera en permanente, podría ser “un movimiento en la dirección equivocada”, al animar a los hogares a utilizar más energía, según Stuart Adam, economista principal del Instituto de Estudios Fiscales, un grupo de reflexión económica.
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