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El número de muertes por Covid-19 en Inglaterra y Gales ha descendido por primera vez en casi dos meses.
Un total de 723 muertes registradas en los siete días anteriores al 5 de agosto mencionaban el Covid-19 en el certificado de defunción, según la Oficina de Estadísticas Nacionales (ONS).
Esta cifra supone un descenso del 11% respecto a la semana anterior y se produce tras seis aumentos semanales consecutivos.
El aumento de las muertes se produjo tras una oleada de infecciones a finales de la primavera y principios del verano causadas por las subvariantes BA.4 y BA.5 Omicron, ambas dominantes en el Reino Unido.
Las infecciones alcanzaron su punto álgido a principios de julio, pero esto sólo se está reflejando ahora en las cifras de mortalidad.
Esto se debe a que la tendencia de las muertes siempre va por detrás de la tendencia equivalente de las infecciones, debido al tiempo que transcurre entre que alguien contrae el virus y enferma gravemente, así como al tiempo que tardan las muertes en registrarse.
Las últimas cifras significan que las muertes en Inglaterra y Gales durante la oleada BA.4/BA.5 parecen haber alcanzado un nivel más bajo que en las dos oleadas anteriores de Omicron en 2022, en las que las muertes semanales alcanzaron un máximo de entre 1.000 y 1.500.
Todas las olas Omicron han alcanzado un pico muy por debajo de la ola Alpha en enero de 2021, cuando las muertes semanales alcanzaron casi 8.500.
Los altos niveles de anticuerpos contra el Covid entre la población -ya sea por la vacunación o por una infección previa- significan que el número de personas gravemente enfermas o que mueren por el virus este año se ha mantenido bajo.
El número total de muertes registradas en Inglaterra y Gales en la semana hasta el 5 de agosto fue un 14% superior a la media para esta época del año, según la ONS.
Sin embargo, esto no puede relacionarse directamente con las temperaturas récord registradas en algunas partes del país a finales de julio.
Es la novena semana consecutiva en la que las defunciones se sitúan por encima de la media, con registros a principios de junio que oscilan entre el 10% y el 18% por encima de lo normal.
Además, las defunciones pueden tardar varios días o incluso semanas en registrarse, por lo que las cifras no reflejan lo que ocurre en tiempo real.
La ONS publicará a finales de agosto un análisis detallado de las muertes que tuvieron lugar el mes pasado.
Información adicional de PA
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