Los creadores de ChatGPT lanzan una versión aún más potente

Los creadores de ChatGPT han revelado un nuevo modelo que dicen es aún más potente que ese sistema ya viral.

La nueva herramienta, GPT-4, está disponible en algunas versiones de ChatGPT y para los clientes de pago de OpenAI, la empresa creadora de ambos sistemas.

OpenAI afirma que la nueva herramienta incluye una serie de mejoras sobre el sistema existente: es capaz de aceptar imágenes como entrada, es más creativa, “alucina” mucho menos y es menos tendenciosa, dijo el director ejecutivo de OpenAI, Sam Altman. El nuevo sistema es capaz de aprobar un examen de abogacía y obtiene las mejores notas en los exámenes de AP.

Pero también “sigue teniendo fallos, sigue siendo limitado y sigue pareciendo más impresionante en el primer uso que después de pasar más tiempo con él”, dijo Altman.

La versión de texto de GPT-4 se lanzará inicialmente dentro de ChatGPT+, la versión premium del sistema lanzada recientemente. También estará disponible a través de la API que OpenAI ofrece a los desarrolladores, y empresas como Duolingo ya han anunciado que la integrarán en sus aplicaciones.

La versión de imagen de la herramienta se lanzará inicialmente con un solo socio, presumiblemente para poder probarla y perfeccionarla. Al principio estará disponible a través de Be My Eyes, una aplicación móvil que ayuda a las personas ciegas o con baja visión, donde permitirá hacer preguntas sobre una imagen.

La parte de imagen del sistema funciona de forma muy similar a las entradas de texto, pero podría permitir casos de uso más desarrollados, como analizar gráficos o responder a preguntas sobre diagramas. También es capaz de entender el humor: OpenAI afirma que, cuando recibe una serie de imágenes humorísticas, como memes e imágenes inusuales, puede explicar el chiste o lo extraño de la imagen.

Además de sus entradas de imágenes, los usuarios pueden establecer reglas para las salidas de GPT-4. Si los usuarios sólo quieren recibir respuestas en verso de Shakespeare, por ejemplo, o en un formato de datos particular, pueden obligar a la herramienta a responder siempre en ese estilo.

OpenAI afirma que GPT-4 es significativamente mejor que los sistemas anteriores. Es a la vez más estable y más capaz, dice: el sistema anterior obtuvo una puntuación entre el 10% más bajo de un examen de abogacía simulado, por ejemplo, mientras que el nuevo quedó entre el 10% más alto.

Pero la diferencia entre las dos herramientas “puede ser sutil” en una conversación informal. “La diferencia sale a la luz cuando la complejidad de la tarea alcanza un umbral suficiente: el GPT-4 es más fiable, creativo y capaz de manejar instrucciones mucho más matizadas que el GPT-3.5”, que le precedió.

Sin embargo, OpenAI admite que sigue teniendo muchas limitaciones. Por ejemplo, sigue “alucinando” con los hechos (un comportamiento común entre estos sistemas, que afirman falsedades con total seguridad), aunque lo hace mucho menos que su predecesor.

Por ello, la empresa advierte de que hay que tener “mucho cuidado” al utilizar estos sistemas, “sobre todo en contextos de alto riesgo”.

OpenAI señaló que las capacidades adicionales del nuevo sistema también conllevan nuevos tipos de riesgo, y afirmó que había “contratado a más de 50 expertos de ámbitos como los riesgos de alineación de la IA, la ciberseguridad, el biorriesgo, la confianza y la seguridad, y la seguridad internacional para probar el modelo de forma adversa”. Sus advertencias se integraron en el nuevo modelo, que ahora es mejor a la hora de negarse a dar información sobre cómo fabricar sustancias químicas peligrosas, por ejemplo.

Aunque OpenAI dijo que espera poder ofrecer en algún momento “cierta cantidad de consultas GPT-4 gratuitas” a personas sin suscripción, no se comprometió a hacerlo, y advirtió de que podría llegar a cobrar más por la herramienta. Estos sistemas de IA requieren grandes cantidades de potencia de cálculo, lo que puede hacer que incluso las preguntas más sencillas sean muy caras de responder.