McLaren toma Miami en un intento de convertirse en el equipo de Norteamérica

Bruce McLaren era un neozelandés, nacido y criado en Nueva Zelanda. Su equipo homónimo de Fórmula 1 y su empresa de supercoches de alta tecnología tienen su sede en Inglaterra.

Sin embargo, McLaren quiere ser el equipo oficial de Norteamérica.

La multitud rugió el miércoles por la noche en la fiesta de inauguración del Gran Premio de Miami cuando el naranja papaya -ese es el tono, no se equivoquen- apareció en el escenario. En una ciudad acostumbrada a las superestrellas y a los súper ricos, los espectadores parecían rebotar al ver a Lando Norris y Daniel Ricciardo.

Sus jefes también estaban allí, pero el Gran Premio inaugural de Miami se ha construido en torno a los pilotos estrella y, vaya, McLaren tiene un equipo. Norris fue votado como el más popular entre las mujeres en una votación de los aficionados y Ricciardo, el australiano que bebe champán de su zapato después de una victoria, tiene la mayor personalidad en el paddock y cuenta con Estados Unidos entre sus países favoritos.

Y luego está el trío de la IndyCar formado por Pato O’Ward, Felix Rosenqvist y Juan Pablo Montoya, uno de los primeros en recorrer el extenso circuito que rodea el Hard Rock Stadium cuando dieron vueltas el miércoles en los coches de carretera de McLaren.

O’Ward, que cumple 23 años el viernes, es un mexicano residente en Texas y el más reciente ganador de la IndyCar. Al igual que Norris, ganó el premio al piloto favorito de la serie entre las votantes femeninas. Montoya, que forma parte de la alineación de McLaren en Indianápolis, es un antiguo piloto de McLaren F1 y el colombiano fue durante mucho tiempo residente en Miami y uno de los embajadores de la carrera. Rosenqvist se trasladó a Indianápolis y el sueco se ha integrado en la comunidad.

El equipo de IndyCar es el billete de McLaren para construir una base en la rica Norteamérica de patrocinadores, que por fin se ha fijado en la F1, y las principales empresas se apresuran a participar. Es un terreno fértil para Zak Brown, el jefe de McLaren Racing, que resulta ser un aficionado a las carreras de California.

Brown ha tenido un ascenso meteórico desde que era propietario de una empresa de marketing con sede en Indianápolis que dominaba el mercado durante los días de bonanza de la NASCAR y empujó a Brown al frente de los deportes de motor. Ahora es el extravagante estadounidense que dirige el equipo del difunto Bruce McLaren a su manera.

Brown es un hombre directo que quiere divertirse, pero se lleva poco crédito por la relevancia que ha adquirido McLaren tanto en la parrilla de la F1 como en la popularidad de los aficionados. McLaren fue votada como la escudería favorita de la F1 en una encuesta de aficionados y Brown dijo que la imagen de McLaren se ha cultivado a través de sus pilotos y de un compromiso para destacarlos a través de medios sociales bien pensados y dirigidos al grupo demográfico más joven.

“Los pilotos tienen la edad y la personalidad adecuadas”, dijo Brown. “Pato es una combinación de Lando y Daniel. Lando es bastante reservado. Bastante ingenioso. Daniel entra bailando en el garaje. Así es Pato con su presencia. Pato tiene la juventud de Lando y la personalidad extrovertida de Daniel”.

“Los pilotos son una parte importante. Creo que hay que dar mucho crédito a nuestros equipos digitales y de comunicación… ¿qué quieren ver los fans? Es la razón por la que volvimos a la papaya en primer lugar. Eso es lo que querían los fans. Los fans saben lo importantes que son para nosotros, y tenemos una buena relación bidireccional”.

La búsqueda de captar el mercado está funcionando, pero tampoco es tan competitiva. La F1 sólo tiene un equipo propiedad de un estadounidense -Gene Haas-, pero la serie no tiene pilotos estadounidenses; McLaren firmó con Colton Herta, una estrella de la IndyCar de California, de 22 años, un contrato de prueba que comienza a finales de este año.

McLaren está aprovechando esta semana, una de las dos carreras estadounidenses del calendario de F1 de este año, para seguir aumentando su presencia. Hay una experiencia completa de “SpeedShop” que se ha anunciado como “alto secreto” y “la experiencia (de carrera) más inmersiva fuera de colarse en el garaje de McLaren”. La SpeedShop se agotó y sólo se ofreció a los miembros del club de fans de McLaren de Estados Unidos.

En The Wharf, en Miami, un McLaren GT 2022 personalizado se exhibe todo el fin de semana como parte del desafío “Vuse Ultimate Ride”. El coche es una colaboración con la marca de ropa de calle UNDEFEATED y se entregará a un aficionado en la carrera de Fórmula 1 en Austin, Texas, en octubre.

El coche verde oliva está inspirado en la librea diseñada para los tres McLaren en las 500 Millas de Indianápolis de este mes y se entregará al ganador de un concurso de presentación de vídeos que responden a “¿cómo impulsas el cambio?” El reto pide a los consumidores que describan en 15-30 segundos el impacto que tienen a diario en su comunidad.

“Aunque el diseño de las nuevas decoraciones para Vuse y Arrow McLaren es emocionante, tener la oportunidad de ayudar a celebrar y premiar a alguien que está en el terreno trabajando y devolviendo es gratificante”, dijo James Bond, fundador de UNDEFEATED.

Brown solo quiere regalar un McLaren y hacer otro nuevo aficionado al equipo.

“Sin los aficionados, no hay deporte del motor”, dijo Brown.

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