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El líder de la oposición rusa Alexei Navalny, encarcelado, dijo en un post en las redes sociales publicado el miércoles que las autoridades penitenciarias lo han colocado en una celda para una sola persona durante seis meses, una medida que su abogado describió como parte de los esfuerzos de las autoridades para dañar la salud de Navalny.
Navalny, de 46 años, dijo en Instagram que se le había negado la oportunidad de visitar a su familia durante los últimos ocho meses. El traslado al confinamiento solitario significa que no verá a su esposa e hijos durante otro medio año, dijo.
“Incluso los maníacos y asesinos en serie condenados a cadena perpetua tienen derecho a reunirse, pero yo no”, dijo. “Cuando te pasa algo así, comprendes aún más agudamente lo importante que es luchar contra este gobierno sin escrúpulos, lo importante que es hacer al menos algo para liberar a Rusia del yugo de estos canallas de Rusia y disipar la droga con la que han envuelto las cabezas de millones de personas”.
Navalny, que denunció la corrupción oficial y organizó protestas masivas contra el Kremlin, cumple una condena de nueve años por fraude en una prisión de máxima seguridad a 250 kilómetros al este de Moscú.
Fue detenido en enero de 2021 a su regreso de Alemania, donde se recuperó de un envenenamiento con un agente nervioso del que culpó al Kremlin. Se le impuso una condena de dos años y medio por violar la libertad condicional y el año pasado fue condenado a nueve años por fraude y desacato al tribunal.
Navalny rechaza los cargos como una venganza política y un intento de las autoridades rusas de mantenerle entre rejas y fuera de la política el mayor tiempo posible. Sus partidarios afirman que su procesamiento pretendía silenciar al enemigo más destacado del Presidente ruso Vladimir Putin.
Su abogado, Vadim Kobzev, alegó que las autoridades penitenciarias colocaron deliberadamente a un recluso enfermo en la misma celda que Navalny para contagiarle una gripe y luego lo trataron con antibióticos, lo que le provocó problemas estomacales y pérdida de peso.
Kobzev describió la decisión de poner a Navalny en régimen de aislamiento durante seis meses como parte de una “estrategia explícita para destruir la salud de Navalny por todos los medios”, y añadió que las autoridades penitenciarias sólo podían haber tomado la medida con la aprobación del Kremlin.
En los últimos meses, Navalny ha sido recluido en una minúscula celda unipersonal, también llamada “celda de castigo”, por supuestas infracciones disciplinarias, como no abrocharse correctamente el albornoz o no lavarse la cara a una hora determinada. Los partidarios de Navalny han acusado a las autoridades penitenciarias de no proporcionarle la asistencia médica adecuada, de utilizar una luz cegadora en su celda y de colocarlo junto a una persona mentalmente inestable.
La semana pasada, sus partidarios erigieron una réplica de la “celda de castigo” de Navalny frente a la embajada rusa en Berlín para concienciar sobre su destino.
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