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El viernes, un tribunal ruso condenó a una alta figura de la oposición a una pena de prisión de varios años, la última medida en la represión del Kremlin contra los activistas de la oposición, los medios de comunicación independientes y los grupos de derechos.
Andrei Pivovarov, ex jefe del grupo Rusia Abierta, fue condenado a cuatro años de prisión por un tribunal de la ciudad sureña de Krasnodar. Pivovarov fue acusado de “dirigir una organización indeseable”, un delito penal según una ley de 2015. Ha mantenido su inocencia y ha insistido en que los cargos contra él se presentaron debido a sus planes de presentarse como candidato al Parlamento en septiembre de 2021.
El encarcelamiento y el enjuiciamiento de Pivovarov forman parte de un amplio esfuerzo del gobierno del presidente Vladimir Putin por reprimir toda disidencia en Rusia. El proceso comenzó con la detención y el encarcelamiento del líder de la oposición Alexei Navalny en enero de 2021. Desde entonces, decenas de activistas de la oposición se han enfrentado a la persecución y la presión de las autoridades. Muchos han abandonado Rusia, mientras que otros han sido encarcelados.
La represión se intensificó después de que Putin enviara tropas a Ucrania el 24 de febrero, y los restantes críticos del Kremlin se enfrentan a cargos por denunciar públicamente la guerra. A principios de esta semana, un tribunal de Moscú mantuvo en prisión preventiva a otra importante figura de la oposición, Ilya Yashin, a la espera de una investigación y un juicio por los cargos de difundir información falsa sobre el ejército ruso. Yashin era uno de los pocos políticos destacados de la oposición que no han abandonado Rusia.
Pivovarov fue sacado de un avión con destino a Varsovia en el aeropuerto de San Petersburgo justo antes del despegue en mayo de 2021. Fue llevado a la ciudad sureña de Krasnodar, donde se le acusó de apoyar a un candidato local en nombre de una organización “indeseable”. Los cargos se basaban en sus publicaciones en las redes sociales apoyando a candidatos independientes en las elecciones municipales de Krasnodar.
Pivovarov rechazó los cargos y señaló que la causa penal contra él se abrió dos días después del cierre de Rusia Abierta. El grupo se disolvió para proteger a sus miembros de la persecución después de ser designado como organización “indeseable”.
Al comentar el viernes su sentencia, Tatyana Usmanova, aliada de Pivovarov, prometió en un post de Facebook que la lucha por su libertad continuará. “Nos esperan la apelación, la casación y el Tribunal Supremo, seguiremos luchando”, escribió Usmanova.
También el viernes, las autoridades rusas declararon “indeseables” a dos medios de comunicación de investigación, prohibiendo su funcionamiento en Rusia.
La Fiscalía General dijo a la agencia estatal de noticias rusa Tass que el grupo de investigación Bellingcat y el medio online ruso The Insider, así como el Instituto CEELI, checo y sin ánimo de lucro, “suponen una amenaza para los fundamentos del orden constitucional (del país) y la seguridad.”
The Insider, un medio de comunicación registrado en Letonia, ha trabajado con Bellingcat en casos de gran repercusión, como los envenenamientos con agentes nerviosos del ex espía ruso Sergei Skripal y del líder de la oposición rusa Navalny. Los sitios web de ambos han sido bloqueados en Rusia desde el comienzo de la guerra en Ucrania.
Desde que Rusia invadió Ucrania, las autoridades rusas han bloqueado decenas de sitios web de noticias y han retirado de las ondas una reconocida emisora de radio crítica. Los sitios web de varios medios de comunicación extranjeros también han sido bloqueados en Rusia, ya que Moscú trató de controlar la narrativa de lo que llama una “operación militar especial” en Ucrania.
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