Vladimir Frolov: Otro general ruso muerto durante la guerra contra Ucrania en un nuevo golpe para Putin

Rusia ha perdido otro general militar en la guerra contra Ucrania, en el último golpe para Vladimir Putin.

Vladimir Frolov, subcomandante del 8º ejército ruso, recibió el sábado un funeral militar en el cementerio Serafimovskoe de San Petersburgo.

Alexander Beglov, gobernador de San Petersburgo, confirmó la muerte en un comunicado diciendo que Frolov luchó en la región de Donbas, en el este de Ucrania.

Su declaración decía: “Hoy decimos adiós a un verdadero héroe. Vladimir Petrovich Frolov tuvo una muerte heroica en la batalla con los nacionalistas ucranianos.

“Sacrificó su vida para que los niños, las mujeres y los ancianos del Donbás dejaran de oír las explosiones de las bombas.

“Para que dejen de esperar la muerte y de irse de casa, para despedirse como si fuera la última vez”.

Beglov describió a Frovlov como un “verdadero patriota” y un hombre “valiente”.

Frolov es el último de varios generales rusos que han muerto desde que Rusia invadió Ucrania el 24 de febrero.

A pesar de la pérdida de militares de alto rango, el presidente Putin sigue afirmando que su “operación militar especial” se desarrolla según lo previsto.

Ucrania afirma que hasta 20.000 soldados rusos han muerto desde que comenzó la guerra hace casi dos meses, frente a entre 2.500 y 3.000 de sus propios soldados.

Esto se produce cuando Rusia dio un plazo para que los combatientes en la sitiada Mariupol se rindieran, que expiró a primera hora del domingo. El Ministerio de Defensa ruso dio a los ucranianos en la gigantesca fábrica de acero Azovstal de Mariupol hasta la 1 de la tarde del domingo (10 de la mañana GMT) para rendirse, diciendo que aquellos que depongan las armas tendrán “garantizada la conservación de sus vidas.”

El portavoz del Ministerio de Defensa ruso, el general de división Igor Konashenkov, dijo que el mando militar ucraniano había prohibido a sus tropas rendirse. Dijo que los militares rusos recibieron la información de las comunicaciones interceptadas.

Konashenkov advirtió que “todos los que continúen la resistencia serán destruidos”.

Afirmó que, junto con las tropas ucranianas, hay unos 400 mercenarios extranjeros cercados en Azovstal, la mayoría de ellos procedentes de países europeos y de Canadá, que se comunican en seis idiomas, según las interceptaciones. La afirmación de Konashenkov no pudo ser verificada de forma independiente.