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El presidente chino, Xi Jinping, anunció una “nueva era” en los lazos de Pekín con Arabia Saudí al reunirse con líderes árabes en cumbres “históricas” durante su estancia estratégica en Oriente Próximo, según dijo en un comunicado en una demostración de fuerza junto con el príncipe heredero Mohammed bin Salman, gobernante del país del Golfo.
Pekín y Riad reafirmaron el viernes su compromiso sobre el mercado mundial del petróleo junto con el principio de no injerencia en los asuntos internos en el segundo día de la visita de alto nivel de tres días del presidente chino.
“La República Popular China acogió con satisfacción el papel del Reino como partidario del equilibrio y la estabilidad en los mercados mundiales del petróleo, y como uno de los principales exportadores fiables de crudo a China”, rezaba la declaración conjunta de los medios estatales saudíes.
Las dos naciones han “intercambiado puntos de vista sobre las formas de reforzar y desarrollar las relaciones de asociación estratégica integral entre el Reino y China”, añade el comunicado.
Xi afirmó que su visita al país del Golfo anunciaba una “nueva era” en las relaciones. También está previsto que se reúna con otros productores de petróleo del Golfo y que asista el viernes a una cumbre más amplia con los países de la Liga Árabe.
“China espera trabajar con Arabia Saudí y los Estados árabes para convertir las dos cumbres en hitos en la historia de las relaciones entre China y los países árabes y entre China y el Consejo de Cooperación del Golfo, y llevar estas relaciones a nuevas cotas”, declaró Xi según el Ministerio de Asuntos Exteriores chino.
El viernes, el CCG reafirmó en un comunicado su apoyo a las decisiones de la OPEP+ para estabilizar el mercado del petróleo.
Washington sigue con atención la visita del líder chino al reino, ya que revela la creciente influencia de su rival económico en la región.
El presidente chino se reunirá con el emir de Qatar, el príncipe heredero de Kuwait y los presidentes de Egipto, Túnez, Yibuti, Somalia y Mauritania, junto con los líderes y primeros ministros de Irak, Marruecos, Argelia, Sudán y Líbano.
Xi ya ha participado en conversaciones bilaterales con el príncipe heredero de Kuwait, el jeque Meshal al-Sabah, el presidente egipcio, Abdel Fattah al-Sisi, el primer ministro iraquí, Shia al-Sudani, el líder sudanés, el general Abdel Fattah al-Burhan, y el presidente palestino, Mahmud Abbas.
En un éxito significativo para ambas naciones, las empresas chinas y saudíes ya han firmado 34 acuerdos de inversión en energía verde, tecnología de la información, servicios en la nube, transporte, construcción y otros sectores, informó la agencia estatal de noticias SPA.
Se espera que los acuerdos iniciales entre ambos alcancen un valor de 30.000 millones de dólares. La inversión financiera oficial en los acuerdos comerciales no ha sido confirmada por ninguno de los dos países.
En los dos últimos días de la visita de Xi, la delegación china tiene previsto firmar acuerdos y memorandos de entendimiento con varios países, además de Arabia Saudí. Esto se produce un día después de que el gigante tecnológico chino Huawei firmara un memorando de entendimiento con el reino sobre la computación en nube y la construcción de complejos de alta tecnología en ciudades saudíes.
La declaración emitida el viernes también subrayaba la ubicación de Arabia Saudí como centro regional para las empresas chinas en la producción y exportación de productos del sector energético.
También sugirió una perspectiva de inversión conjunta en proyectos energéticos en la región y “países consumidores de energía en Europa y África”.
Se espera que el tercer día de la visita de Xi cuente con una importante participación y conversaciones con los líderes de los Estados de la Liga Árabe que se encuentran en Oriente Próximo para la cumbre árabe del Golfo, Levante y África en Riad.
Arabia Saudí dio una gran bienvenida al Sr. Xi, ya que su coche fue escoltado hasta el palacio real de Riad por miembros de la Guardia Real saudí montados en caballos árabes, en marcado contraste con la bienvenida genérica dada a Joe Biden cuando había visitado la nación del Golfo en julio de este año.
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