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Los niveles de vida están a punto de caer a su ritmo más rápido desde hace al menos tres décadas, o quizás desde los años 70. Las previsiones de los economistas parecen volverse más sombrías con una frecuencia alarmante.
Los precios ya están subiendo mucho más rápido que los salarios y se espera que las cosas empeoren considerablemente este año.
Muchos de nosotros habremos recibido alarmantes cartas de las compañías energéticas informándonos de subidas masivas. Si no es así, no hay duda de que habrá notado que los precios en las gasolineras han alcanzado niveles récord.
El encarecimiento de los carburantes se traduce en costes adicionales para las empresas, que pronto se trasladarán a los consumidores.
La guerra de Rusia en Ucrania está teniendo un impacto más allá de las fronteras de ese país, haciendo subir los costes de la energía y los alimentos en toda Europa.
Pero la crisis del coste de la vida en el Reino Unido tiene raíces mucho más profundas y ya se estaba gestando mucho antes de que Vladimir Putin ordenara a sus tropas atacar.
Aunque todos somos conscientes de cómo nos está afectando el aumento de los precios, es probable que queden muchos interrogantes.
¿Qué está causando realmente esta situación, cómo se ha permitido que ocurra y qué se puede hacer para aliviarla a corto plazo, así como para protegernos en el futuro?
Estaré aquí para responder a sus preguntas en directo el miércoles 16 de marzo a las 15:00 horas. Para participar, regístrese y publique sus preguntas en los comentarios; responderé a todas las que pueda.
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