Los jefes del aeropuerto más activo de Gran Bretaña, Heathrow, dicen que tienen la intención de ejecutar todos los vuelos programados durante la inminente huelga de los miembros del sindicato PCS que trabajan para la Fuerza Fronteriza del Reino Unido.
Heathrow es, con diferencia, el mayor aeropuerto que se verá afectado por el paro, que se prolongará del 23 al 26 y del 28 al 31 de diciembre, ambos inclusive.
La huelga se enmarca en un conflicto salarial, de pensiones y de seguridad en el empleo.
Para sustituir al personal que normalmente comprueba los pasaportes de los pasajeros que llegan, se está formando a militares y funcionarios voluntarios, pero no podrán ofrecer el mismo nivel de servicio.
El director ejecutivo de Heathrow, John Holland-Kaye, declaró: “Estamos haciendo todo lo posible para proteger los horarios operativos completos en los días de huelga de la Fuerza Fronteriza y los viajes de salida y la gran mayoría de los viajes de llegada no deberían verse afectados.
“Tenemos gente extra en las terminales en los días de mayor actividad, incluyéndome a mí y a mi equipo de gestión, para asegurarnos de que ponemos a la gente en camino de la forma más fluida posible y empezamos a devolver la alegría a los viajes.”
Algunas llegadas, especialmente las procedentes de Norteamérica, podrían retrasarse varias horas.
Como en todos los aeropuertos, el día de Navidad será el más tranquilo de los días de huelga, con sólo 83.400 pasajeros en 352 vuelos. Pero Heathrow volverá a funcionar a pleno rendimiento del 28 al 30 de diciembre. Cada día habrá unos 125.000 pasajeros en 575 vuelos.
Los otros aeropuertos afectados por la huelga son Gatwick, Birmingham, Manchester, Glasgow y Cardiff.
Mientras tanto, el secretario general del PCS, Mark Serwotka, arremetió contra el uso de militares para controlar los pasaportes.
Dijo: “Nuestros miembros de la Fuerza de Fronteras son especialistas en sus campos y no pueden ser sustituidos por personas con sólo unos días de formación.
“La ministra del Interior dice que no está ‘dispuesta a comprometer la seguridad en la frontera’, pero está encantada de utilizar personal militar sin formación para romper una huelga de trabajadores”.
“A nuestros miembros se les ha ofrecido una patética subida salarial del 2%, una de las ofertas más bajas de toda la economía. Si se toma en serio la resolución de este conflicto, debería poner dinero sobre la mesa de negociación, no soldados uniformados en nuestros aeropuertos.”
Suella Braverman, ministra del Interior, ha advertido a los pasajeros que esperen graves trastornos como consecuencia de la huelga.
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