El Señor de los Anillos: Los Anillos del Poder, episodios 1 y 2: Bienvenidos a la Tierra Media

Han pasado ocho largos años desde que la épica trilogía de El Hobbit concluyó con La Batalla de los Cinco Ejércitospero ahora la espera ha terminado para los fans de Tolkien: es hora de volver a la Tierra Media. Esta nueva saga de los showrunners JD Payne y Patrick McKay, basada en los extensos apéndices de JRR Tolkien a El Señor de los Anillostiene un comienzo espectacular y cinematográfico, a pesar de estar pensada para el streaming en casa y no en las salas de cine. A continuación, un desglose de lo que sucedió y de quiénes conocimos en los dos primeros episodios de El Señor de los Anillos: Los Anillos del Poder. Cuidado, aquí hay spoilers:

“Nada es malo en el principio”

El primer episodio se abre en el legendario reino de Valinor, “la tierra al otro lado del mar”. Este es el hogar de los elfos, donde la joven princesa Galadriel está jugando en un campo, haciendo un hermoso y adornado barco de papel. Por desgracia, incluso en su paraíso pastoral bañado por el sol, los niños son niños y hunden su barco con una piedra. Galadriel se siente ofendida por esto, pero su lucha se ve interrumpida por la llegada de su hermano mayor (Will Fletcher), quien le da algunos consejos de vida. Al poco tiempo los elfos viajan a la Tierra Media, donde el hermano mayor muere en una batalla contra el malvado Lord Morgoth y su títere Sauron. Esto inspira a Galadriel (Morfydd Clark) a tomar la espada en su memoria, cazando a Sauron a través de la Tierra Media durante siglos hasta que retomamos la historia en Forodwaith, un páramo norteño congelado.

Galadriel consigue abatir a un amenazante troll de las nieves y cree que está más cerca de encontrar a su némesis, pero sus fieles tropas creen que les está guiando en una salvaje persecución de Sauron. Están decididos a volver a casa. Cuando llegan a Lindon, capital de los altos elfos, el rey Gil-Galad (Benjamin Walker) acepta y le entrega a Galadriel un billete de ida a Valinor. Sin embargo, ella no se conforma con olvidar la amenaza de Sauron, así que en el último momento abandona el barco. Parece que tendrá que nadar en los Mares del Sur hasta que es rescatada por el valiente náufrago Halbrand (Charlie Vickers), y pronto la pareja se encuentra a la deriva en un misterioso barco.

Forjando el camino

Mientras tanto, el rey Gil-Galad tiene un trabajo para Elrond (Robert Aramayo). Quiere que ayude al famoso herrero elfo Celebrimbor (Charles Edwards) a crear una forja enormemente poderosa. No tienen la mano de obra (¿la fuerza de los elfos?) para hacerlo ellos mismos, así que Elrond tiene la idea de pedir un favor a sus viejos amigos los enanos. La pareja viaja a la fortaleza enana de Khazad-dûm, donde Elrond se entera de que su viejo amigo el príncipe Durin (Owain Arthur) está tan enfadado por haberse perdido su boda que no va a recibir ningún favor. Hasta que Elrond deja que el príncipe gane una exhibición pública de fuerza (rompiendo rocas) y se abre paso a través de charlas, cumplidos y conquistando a la esposa de Durin, la princesa Disa (Sophia Nomvete). Eso es suficiente para convencer al príncipe, que lleva el plan de forja a su padre, el rey Durin (Peter Mullan).

El Inspector de los Elfos

Con los elfos convencidos de que la amenaza de Sauron se ha desvanecido, el decreto del Rey Gil-Galad resuena por toda la Tierra Media, llamando a todos los elfos a casa. Esto no es una gran noticia para el soldado elfo Arondir (Ismael Cruz Cordova), que ha pasado casi 80 años en las tierras del sur, las tierras del hombre, y tiene su corazón puesto en la sanadora local Bronwyn (Nazanin Boniadi).

Justo cuando Arondir está a punto de marcharse, encuentra una razón para quedarse que es incluso más convincente que hacer ojitos a Bronwyn. Hacia el este, los animales están enfermando y las cosechas se están perdiendo, y cuando Arondir y Bronwyn van a investigar, encuentran el pueblo de ella arrasado y unos misteriosos túneles debajo de él.

Bronwyn corre a su casa para avisar a los demás, llegando justo a tiempo para ayudar a su hijo Theo (Tyroe Muhafidin) a matar a la criatura que construyó el túnel: un orco, leal a Morgoth y Sauron. La decisión del Rey de retirar sus tropas parece más precipitada a cada momento.

Hobbits traviesos

Finalmente, en Rhovanion, el País Salvaje al este del Anduin, nos encontramos con un grupo de harfoots, un predecesor evolutivo de los tan queridos hobbits. Y al igual que los hobbits, algunos de los más jóvenes parecen haber desarrollado una inquietante sed de aventuras y un gusto por la emoción. Nori Brandyfoot (Markella Kavenagh) y su mejor amiga Poppy Proudfellow (Megan Richards), un poco más sensata, son criaturas curiosas a las que les encanta salir corriendo a recoger bayas, a pesar de los temores de sus padres sobre lo que les podría pasar.

Cuando un cometa atraviesa el cielo y se estrella para aterrizar cerca de ellos, la pareja no puede evitar investigar. En el cráterencuentran a un misterioso desconocido alto y con barba (Joseph Mawle) que parece tener poderes mágicos. ¿Podría este desconocido resultar ser un mago de cierta importancia? Es demasiado pronto para asegurarlo, pero una cosa es segura: esta gran aventura no ha hecho más que empezar.